En el auditorio “Fernando Castellanos Tena” de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales (FDyCS) de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM), en el marco de los 50 años de la publicación del libro “La democracia en México”, del doctor Pablo González Casanova, se realizó el análisis de la obra.
El analista y politólogo de la UNAM Velasco Gómez destacó que “en este gran libro no sólo va a tener el mérito de dar todos los indicadores de por qué no hay democracia, sino también afirma que esta democracia no es conveniente, ni adecuada; no nos traguemos el mito de la democracia: la democracia es una farsa, y más farsa en México. Pero el gran juicio agudo y profundo de Pablo González Casanova, es que éste no es el modelo para nosotros”.
Velasco Gómez enfatizó que los argumentos en el libro básicamente son tres. El primero es que no hay democracia en México en el sentido liberal como democracia euroamericana; el segundo, que no hay democracia sino hay un rito democrático y ésa es una farsa; y tercero, que la democracia es una farsa, no es decir que no hay democracia como tal. “Aquí hay una ritualización del poder que tiene un efecto de legitimación muy exitoso. Es aquí donde se observa el éxito de la farsa en el régimen autoritario mexicano que perduró hasta los años ochenta”, refirió.
Por su parte, Héctor Horacio Campero Villalpando, profesor investigador de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales, expresó que en México, González Casanova construye una propuesta para comprender y transformar las estructuras sociales y de poder que articulan México, con base en interpretar su historia mostrándonos las contradicciones entre la realidad formal y material.
“La democracia en México constituye un diagnóstico de alto valor académico que coincide con el objeto de estudio de la filosofía política contemporánea, que en alguna de sus obras no se propone enseñar cómo debieran comportarse los gobernantes y los pueblos con el fin de alcanzar una excelencia moral y de aproximarse al régimen político ideal. Por el contrario, la filosofía política moderna intenta ofrecer consejos eficaces que se derivan no de un conocimiento moral, sino de la experiencia de cómo se han comportado los gobernantes y los gobernados y cuáles han sido los propósitos que efectivamente han buscado realizar”, dijo Horacio Campero.