Previo a una reunión con funcionarios estatales para plantear esta problemática, el secretario general de la Unión Ganadera y presidente del Sistema Producto Bovino del Estado de Morelos, Roberto Reza Quiroz, calculó que cerca del 20% de la carne que se comercializa y consume en Morelos proviene de rastros clandestinos o es introducida a la entidad por productores de otras entidades sin controles sanitarios y transportada en condiciones insalubres.
Explicó que debido a que los productores morelenses no pueden satisfacer la demanda de carne del mercado interno, es necesaria traer de otras entidades, pero desafortunadamente hay quienes aprovechan esta circunstancia no sólo para competir deslealmente sino para actuar fuera de la ley, poniendo en riesgo la salud de los consumidores.
Dijo que hace poco fue detenida en el municipio de Tlaquiltenango una camioneta pick up, proveniente del estado de Oaxaca, que transportaba carne en la batea, la cual estaba sólo cubierta con lonas.
“Cuando se traslada (carne) de un estado a otro, tiene que traer efectivamente una guía zoosanitaria, una guía de tránsito y la documentación que acredite la propiedad de esa carne. La otra es el sello, pero la carne se tiene que trasladar en frigorífico, no tapada con lonas o con hielo. ¿Y qué pasó? No pasó nada”, narró.
El líder ganadero afirmó que hay escasa actuación de las autoridades para frenar la comercialización de carne de dudosa procedencia, por lo cual ha sido necesario “un apretón, aquí qué tenemos que hacer con las autoridades para cambiar esta situación”.
Consideró indispensable que la Comisión Estatal de Seguridad y la Secretaría de Salud intensifiquen las revisiones a los vehículos que transportan cárnicos que circulan e ingresan al estado para verificar la legalidad de la mercancía y que cumplan con las medidas de sanidad para el consumo humano.
Señaló que la proliferación de los rastros clandestinos es otro asunto que las autoridades deben atender, detectar y combatir, a través de verificar la procedencia de la carne con revisiones a las carnicerías.
“Precisamente hoy (ayer) la plática con gobierno, para verificar esos rastros clandestinos y claro que no van a decir ‘aquí están los rastros”. No, hay que detectarlo en las carnicerías”, manifestó.