La activista, reconocida por su apoyo a féminas recluidas, señaló la importancia de que desde las instituciones públicas se tome la importancia que amerita un problema tan grave como la violencia en contra de la mujer.
Este llamado lo hizo ante un número reducido de diputados, que pese a ser los anfitriones, iniciaron la sesión solemne con casi una hora de retraso y apenas con el quórum necesario para el desarrollo de la misma.
"Ser mujer el día de hoy es romper con los viejos modelos esperados para nosotras, es construir una cultura del buen trato entre hombres y mujeres”, señaló Elena de Hoyos Pérez, ante unos irrespetuosos diputados que se merecieron el abucheo de las mujeres presentes.
Es que la sesión fue citada a las 10:30 de la mañana y el comienzo de la sesión fue a las 11:44, con un segundo pase de lista que alcanzó apenas la asistencia de 17 diputados.
"Que les descuenten, que les descuenten", gritaron con razón las mujeres presentes. Pese a su molestia justificada, la presidenta de la Mesa Directiva, Lucía Meza Guzmán, pidió guardar silencio y respeto al pleno del Congreso local, a lo cual las féminas molestas le respondieron: "Pedimos lo mismo, respeto".
Finalmente, la presea fue otorgada a Elena de Hoyos, aunque la diputada Teresa Domínguez Rivera, en su discurso ante el pleno del Congreso local, lamentó la falta de respeto de sus compañeros hacia las mujeres.
En la ceremonia estuvieron presentes también los representantes del Poder Judicial, la magistrada presidenta del Tribunal Superior de Justicia, Nadia Luz María Lara Chávez; y del Ejecutivo, Matías Quiroz Medina, secretario de Gobierno.