Con aparente desenfado, el encargado de la seguridad estatal dijo estar dispuesto a acudir al llamado de los integrantes del Poder Legislativo para presentar los resultados obtenidos y mostrar, con cifras respaldadas por el mismo gobierno federal, el descenso en la incidencia delictiva.
No obstante, Capella Ibarra recalcó que el tema de la seguridad debe ser tratado con seriedad y transparencia, pero reprobó que el asunto sea utilizado para sacar provecho político a costa de las víctimas del delito.
“Yo ya se los dije que yo voy a donde me inviten, yo no tengo problema. Hay que hacerlo de forma transparente y de forma pública. Yo creo que ya basta de doble moral en este estado, y también ya basta de que el tema de seguridad pública se esté utilizando como una bandera política para sacarle raja a un tema que lacera y daña profundamente a muchas familias”, subrayó.
Insistió en que “no podemos seguir poniendo este tema en una plataforma de discusión partidista, no es como se va a resolver; estoy convencido que la enorme mayoría de los morelenses quiere paz y seguridad, y la mayoría de los morelenses está consciente que las decisiones del gobernador van por el camino correcto, que hay una realidad distinta y todavía hay mucho por hacer”.
Insistió en que hay disminución significativa en la incidencia de todos los delitos, la cual está respaldada por el propio gobierno federal, aunque reconoció que el delito que todavía preocupa a las autoridades, por su frecuencia, es la privación ilegal de la libertad en su modalidad de secuestro.
En la sesión del Congreso del miércoles no se logró ningún acuerdo para llamar a comparecer a Capella Ibarra ante el Pleno legislativo, luego de que diputados del Partido de la Revolución Democrática abandonaron el recinto y, según sus homólogos de oposición, acusaron que la maniobra fue para impedir que por mayoría se aprobara la comparecencia del encargado de la seguridad estatal.