La magistrada Rocío Bahena Ortiz regresó a su adscripción en Cuernavaca, luego de 30 días de haber estado asignada a una ponencia en la sala del Tercer Distrito Judicial, por lo que en su lugar fue asignada la magistrada Elda Flores León, quien estaba adscrita a la primera sala de Cuernavaca.
La magistrada Berta Rendón Montealegre, quien ocupaba una de las tres ponencias de la sala del Segundo Distrito Judicial con sede en Jojutla, cambió su adscripción a la tercera sala de Cuernavaca; en su lugar fue asignado el magistrado Andrés Hipólito Prieto.
Pese a la rotación de los magistrados en las salas, quien permaneció inamovible en su ponencia de la sala del Tercer Circuito fue el magistrado Valentín González García, quien ha insistido en mantenerse en su lugar -según sus propias declaraciones-, porque le agrada el paisaje y no le gusta viajar a Cuernavaca por las aglomeraciones vehiculares.
Sin embargo, hasta ahora se desconocen los resultados de la investigación que hace un año autorizó el Pleno del TSJ ante las denuncias de presuntos actos de corrupción cometidos por González García, quien según algunos litigantes se dedicaba a pedir dádivas a cambio de sentencias favorables. Asimismo, el lugar que dejó vacante la magistrada supernumeraria de la sala auxiliar, Leticia Taboada Salgado, será cubierta temporalmente por el magistrado Rubén Jasso Díaz.