En conferencia de prensa, los legisladores Carlos de Jesús Alejandro, Gisela Raquel Mota Ocampo, Víctor Raymundo Nájera Medina y Javier Orihuela García, consideraron necesario que el gobernador de esta entidad, Graco Ramírez Garrido Abreu, le dé solución democrática y pacífica a ambos conflictos, iniciados durante la gestión del ex gobernador Marco Adame Castillo.
Acompañados por vecinos, ejidatarios y comuneros (quienes se trasladaron a la Cámara Baja), solicitaron el retiro de la Policía Federal y la Estatal de las mencionadas poblaciones, pues argumentan que se encuentran ahí para el resguardo de maquinaria y material de construcción, lo cual fue considerado por los pobladores y los diputados inválido, ya que no hay intención o interés de los pobladores en dañarlos.
“No se debe permitir que la inconformidad o los problemas con los pobladores se resuelva con golpes y violaciones a los derechos humanos, menos aún que lo permita un gobierno de izquierda”, enfatizó la diputada Gisela Mota.
Nájera Medina coincidió en la necesidad de impulsar la construcción de grandes obras, pero a condición de que sean verdaderamente en beneficio de la comunidad y no, como al parecer es el caso con la ampliación de la autopista y la construcción de termoeléctricas, para dañarla.
Señaló, al respecto, que hay denuncias por daños a la salud, al medio ambiente y a los recursos hídricos que provocan las termoeléctricas en los lugares donde se han instalado y que falta información sobre el supuesto proyecto de construir una en Huexca, donde apenas recientemente hubo veda para el uso de acuíferos debido a la sobreexplotación a los que fueron sometidos.
Los legisladores ofrecieron su mediación en el conflicto y solicitaron información sobre los proyectos mencionados y conminaron al gobernador Graco Ramírez a que, con base en experiencia política, impulse el diálogo para la solución pacífica de este conflicto que le dejó el anterior gobierno.