El encargado de despacho de la dependencia, José Casas indicó que “son por lo menos unos 80 puntos en toda la ciudad en los que se está destruyendo la infraestructura urbana con la apertura de zanjas para la colocación de redes diversas subterráneas, el problema es que tienen un tiradero que es ya molestia colectiva por los efectos que provoca, particularmente en la circulación vehicular”.
Luego agregó que “dialogamos en diversas ocasiones con ellos, hubo compromisos, pero nunca cumplieron, nos parece que los ejecutivos de la paraestatal no están muy atentos a lo que sus empresas contratistas hacen, los llevamos anoche a hacer un recorrido y confirmaron las irregularidades”.
Sin embargo, agregó José Casas, “la suspensión en la continuidad de las obras se dará hasta que hagan todas las reparaciones técnicas correspondientes y es que abren el pavimento y lo vuelven a rellenar con el mismo escombro, como es cascajo, en la siguiente temporada de lluvias tendremos hundimientos por todas partes y entonces todo será responsabilidad del Ayuntamiento, ese tipo de materiales no compacta bien, ellos lo saben, pero no les interesa”.
Incluso, dijo, “ya solicitamos una intervención de Protección Civil y del Instituto Nacional de Antropología e Historia para que revisen lo que viene pasando, nosotros no sabemos quién les dio el permiso de hacer aberturas por todas partes, pero sustancialmente en el centro histórico de la ciudad, es donde nos pega más, porque la ciudadanía cree que es la comuna”.
No descartó que pudiera responderse con alguna acción de revancha, “pero se actúa con fundamento en los derechos y obligaciones de cada quien, pueden ocurrir desgracias, porque hay hoyos abiertos donde menos se espera uno, no podemos permitirlo”.