Al sostener una reunión de trabajo para evaluar las metas alcanzadas durante este sexenio en materia de salud, en presencia de representantes del sector público y privado, médicos especialistas, así como directivos de los hospitales dependientes del Gobierno del Estado, Marco Adame señaló que con estos logros, en Morelos es necesario reconocer en un política pública, como lo es la salud, una oportunidad de atender a la sociedad, pero no de cualquier manera, sino de la mejor manera posible.
“Son buenas noticias que nos deben utilizar a multiplicar los esfuerzos, para que los pasos dados no se trunquen con el cambio de un gobierno, con el fin de una administración y el inicio de otra; más allá de cualquier circunstancia electoral, que están próximas, lo importante es que quienes somos parte del sistema estatal de salud, velemos porque los pasos dados, y los retos por venir estén a buen resguardo”, expresó durante la reunión.
Acompañado de la Presidenta del Patronato del Sistema DIF Morelos, Mayela Alemán de Adame, y del secretario de Salud, Víctor Caballero Solano, el gobernador recibió un recuento de los avances alcanzados en diferentes áreas en voz de sus colaboradores como Melquisedec Piedragil, director del Hospital del Niño; del director de los Servicios de Salud, Carlos Carrillo; de los médicos especialistas encargados de los trasplantes de riñón y mano del Hospital José G. Parres, representantes de la Delegación del IMSS, y de instituciones privadas.
Adame Castillo, insistió que trascender en lo logrado a la fecha, es una responsabilidad histórica de quienes hoy están al frente del Sector Salud, en el sector público y privado, para lo que se necesita incorporar con claridad una agenda de largo plazo, y dejar de ver los temas importantes con la visión de tres o seis años, sino reconocer que el derecho de la salud tiene que ser más que plazos.
Sobre el Día Mundial de la Diabetes, el secretario de Salud, Víctor Caballero, dijo que es uno de los principales problemas de salud pública en el país, revelando que en Morelos hay poco más de 14 mil pacientes en tratamiento con esta enfermedad, de los cuales el 36 por ciento está controlado.