A pesar de que la iniciativa de ley fue dictaminada a favor, acuerdos entre las fuerzas políticas impidieron que fuera aprobada por la mayoría de los legisladores.
Con la legislación se pretendía evitar la exhibición de publicaciones cuyo contenido atenta contra el sano desarrollo de la niñez y transgrede los valores fundamentales de la sociedad, de tal forma que se habían determinado sanciones directas para los distribuidores de dichos medios.
Así mismo, la ley determinaba entre otras cosas que para poder comercializar dichas publicaciones, los periódicos o revistas deberían estar envueltas en bolsas de plástico oscuras, elaboradas con material biodegradable, cerradas y en lugares a los que solamente tengan acceso personas mayores de edad.
De igual forma especificaba la creación de un comité técnico para la calificación de publicaciones y revistas ilustradas, que estaría facultado para realizar inspecciones en todos los lugares donde se comercialicen los impresos que puedan incitar a la violencia o que difundan pornografía por medio de las imágenes y texto, a fin de que no se expongan a la vista de la ciudadanía.
La normatividad desechada tenía como finalidad proteger a niños y jóvenes de la exposición dañina a contenidos impresos inadecuados, como aquellos que promueven la sexualidad y usan a las mujeres como objetos o bien fomentan el morbo y el amarillismo mediante la exhibición de cadáveres mutilados.
Dentro de las sanciones que la ley determinaba, se fijaban multas desde 20 hasta los mil salarios mínimos vigentes a las personas físicas o morales que distribuyeran las publicaciones antes referidas sin una cubierta, si el tiraje fuera de 100 ejemplares diarios. Y si el tiraje rebasara los 900 ejemplares, la sanción alcanzaría los 50 mil salarios mínimos.
Los diputados que votaron en contra de la aprobación de la Ley de Publicaciones y Revistas Ilustradas del Estado de Morelos fueron los priistas Omar Guerra Melgar, Javier Mujica Díaz, Jorge Arizmendi García, Gabriel Hadad Giorgi, Rufo Villegas Higareda, David Salazar Guerrero, Julio Espín Navarrete, Andrés González García, Julián Abarca Toledano, Guadalupe Jiménez Tovar, Jovita Herrera, Lilia Ibarra Campos y Antonio Domínguez Aragón; así mismo, los perredistas Rabindranath Salazar Solorio y Fidel Demédicis Hidalgo. El diputado por Nueva Alianza, Othón Sánchez Vela, también se manifestó en contra.
En tanto, los legisladores panistas Luis Miguel Ramírez Romero y Dulce María Huicochea, así como el priista Esteban Gaona Jiménez, determinaron abstenerse de votar, lo que de alguna manera, señalaron observadores, constituyó un tácito apoyo a mantener la distribución abierta de ese tipo de materiales.
También señalaron que al no participar en la votación terminaron por avalar la postura de la mayoría de sus compañeros gente como Fernando Martínez Cué, Hortencia Figueroa Peralta, Rufo Villegas Higareda, Othón Sánchez Vela, Julián Abarca Toledano, Javier Mujica Díaz, Javier Lezama Rodríguez, David Salazar Guerrero, Jessica Ortega de la Cruz, Guadalupe Jiménez Tovar y Juana Barrera Amezcua e Israel Andrade Zavala.
A pesar de que la mayor parte de los legisladores firmaron su aprobación a la presentación del proyecto de iniciativa de ley (excepto el priista Fernando Martínez Cué) en el proceso de votación decidieron ignorar el reclamo social y votar para que la pornografía se exhiba libremente en las calles de Morelos.