Explicó que a pesar de que para el ejercicio fiscal 2011 el TSJ recibió un presupuesto de 364 millones de pesos, los recursos son apenas suficientes para cubrir el gasto corriente y no hay fondos para inversión.
De acuerdo con el titular del TSJ, del presupuesto asignado a la institución para este año cerca de 293 millones de pesos están destinados al gasto corriente; 21 millones están etiquetados para el pago de pensiones por jubilación de magistrados y consejeros de la Judicatura; 7 millones de pesos más para el pago de pensiones por jubilación de otros trabajadores del TSJ; 3 millones de pesos más están destinados para el incremento salarial y prestaciones de la base trabajadora; y 40 millones de pesos para la implementación de la tercera y última etapa del sistema oral de justicia penal.
Expresó que las jubilaciones, principalmente de altos funcionarios del Poder Judicial, se han convertido en una obligación difícil de afrontar y expresó su preocupación ante la posibilidad de que algunos magistrados en activo puedan solicitar su jubilación y reclamar su haber de retiro.
Indicó que la situación financiera del TSJ “es una situación difícil, es una situación compleja, y a mí lo que más preocupa es la cuestión de la inversión. Es decir, nosotros estamos viviendo al día con lo que tenemos, no hay inversión, no le estamos apostando al crecimiento del Poder Judicial y aún cuando hay planeación no hay como concretarla por la falta de recursos”.