“El destape de José Antonio Meade como posible candidato del Partido Revolucionario Institucional a la presidencia de la república provocó un impacto de unidad en el priismo morelense, sectores y organizaciones se sumaron a la decisión y eso tendrá repercusiones muy positivas en el proceso local”, aseguró el presidente del CDE del partido, Alberto Martínez González.
El dirigente estatal calificó la unción de Meade como “la mejor decisión que se podía darse entre aquellos que aspiraban a la candidatura, porque el señor es bien visto hasta por algunos sectores de oposición, lo que muestra que iniciará con una tendencia a la alza en lo que toca a respaldo popular”.
Destacó que se trata de una figura con una formación profesional indiscutible, además de que goza de buena fama y de prestigio porque se le reconocen antecedentes de honestidad y trabajo cuando ha desempeñado cargos públicos, como el que acaba de dejar para ir en busca de otro proyecto personal.
Martínez González recordó que hasta hace algunos meses, se le concedían pocas posibilidades a su partido a fin de que pudiera prolongar su mandato a nivel presidencial, pero con Meade Kuribreña hasta adversarios admiten que tienen las mejores posibilidades de dar continuidad al proyecto de Enrique Peña Nieto.
Y en lo que se refiere a lo local, advirtió que “eso de piso parejo para todos aquellos que buscan la candidatura al gobierno estatal, va en serio, no se trata de un simple discurso; la posición se dará a aquél que ofrezca mayor rentabilidad electoral, ya que en esta ocasión vamos por la recuperación del estado de Morelos”.
Manifestó que Meade Kuribreña es considerado como un aspirante externo y aquí también podría surgir alguna figura de perfil ciudadano, ya sea a nivel de diputaciones locales, federales, alcaldías o la misma gubernatura, porque nadie la tiene segura y el juego será abierto.
“En lo que se refiere a nuestro partido, las líneas vienen de arriba hacia abajo, hay que ser disciplinados e institucionales y si el CEN abrió las puertas a los mejores cuadros, a pesar de que no sean militantes, en nuestra entidad haremos lo propio. Nadie tiene los espacios comprados, hay que ganárselos con esfuerzo y vocación de servicio”, precisó. Pero admitió que se tiene que desarrollar un intenso esfuerzo para poder convencer voluntades, luego de 17 años alejados del manejo del poder público en la entidad.