La Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) no tiene definido el tiempo que tardará en reparar el socavón de alrededor de ocho metros de profundidad que se generó en el Paso Exprés y que cobró la vida de dos personas que circulaban en el interior de un vehículo compacto por esa vía de comunicación cuando se dio el reblandecimiento.
El derrumbe ocurrió alrededor de las cinco y media de la mañana de este miércoles, en el Paso Exprés, cerca del Conalep de la colonia Chipitlán de Cuernavaca, y fue alrededor de las seis de la mañana cuando se recibió el llamado de emergencia y los cuerpos de rescate acudieron para suspender el tránsito vehicular y acordonar el área.
La prioridad, de acuerdo a las autoridades, fue rescatar un vehículo Jetta color gris con placas del estado de Guerrero que cayó tras darse el reblandecimiento de la tierra. Primero se utilizaron grúas para hacer un reconocimiento del área, introduciendo a elementos del cuerpo de bomberos, así como el uso de drones y finalmente decidieron traer maquinaria pesada para retirar los escombros y construir una rampa que facilitara el rescate, que llevó más de nueve horas.
Pasado el mediodía se logró abrir la circulación en el carril lateral de norte a sur, sin embargo, el paso de los vehículos fue alternado para que el tránsito vehicular fluyera en ambos sentidos.
Alrededor de la una de la tarde arribó al lugar de los hechos el titular de la SCT, Gerardo Ruiz Esparza, quien informó que realizarán los peritajes y dictámenes técnicos necesarios para deslindar responsabilidades de lo ocurrido.
Aseguró que un reblandecimiento del subsuelo generado por las lluvias de los últimos tres días, las cuales fueron consideradas atípicas, generó el socavón, además de que un drenaje con más de 40 años de antigüedad se taponeó, generando que la situación se agudizara; argumentó que el Paso Exprés tiene la certificación necesaria, sin embargo, esperarán que concluyan los peritajes para deslindar responsabilidades.
Por su parte, el director general de carreteras de la SCT, Clemente Poon Hung, explicó que se generó un caudal de más de ocho metros la noche del martes y esa cantidad de agua se metió en el terraplén (tierra con la que se rellenó el terreno), generando el reblandecimiento.
Explicó que serán integrantes del Colegio de Ingenieros Civiles de Morelos quienes participarán en el peritaje. Por el momento, en los carriles laterales –en sentido norte a sur- no hay ningún riesgo, pero esperarán a que se lleven a cabo los peritajes para determinar si es viable abrir la carretera. Dijo que no hay un tiempo determinado para la reparación, pero trabajarán a marchas forzadas para que se resuelva en máximo dos semanas.
Refirió que en las carreteras del país no había ocurrido un hecho similar, salvo en lugares donde se registran huracanes.
Además, comentó que trabajarán coordinadamente con Protección Civil para atender todas las observaciones hechas en el Paso Exprés.
Por su parte, el coordinador de Protección Civil Estatal, Javier Bermúdez Alarcón, y el director de Protección Civil de Cuernavaca, Fernando Manrique Rivas, coincidieron en señalar que exigirán que se haga una investigación a fondo de los hechos para deslindar responsabilidades.
Ambas dependencias hicieron observaciones con antelación para que se atendiera el problema cuando el socavón apenas iniciaba, específicamente el pasado fin de semana, cuando las lluvias se recrudecieron.
Manrique Rivas señaló que, tanto la SCT como la empresa encargada de la obra, Aldesa Construcciones, tendrán que responder por lo ocurrido.
Karim Ayme Abud, vecina de la zona, incluso señaló que hay documentos en los que desde fechas anteriores se exige a la SCT que atienda la problemática. Refirió que advirtieron del riesgo que corren los estudiantes del Conalep por no tener un paso peatonal, además de que también alertaron de la antigüedad de la tubería, que el caudal de la barranca de Santo Cristo en esa zona había sido reducido por la obra, y que se estaba deslavando la tierra. Sin embargo, nunca hicieron caso a sus demandas.
El recuento
Poco antes de las 06:00 horas, el automóvil en el que viajaban un hombre de 65 años y su hijo de 33 años se fue al fondo de un boquete que presuntamente una tubería rota abrió en el centro del Paso Exprés.
“A las 5:50 de la mañana, aproximadamente, un poco antes, se presentó este agujero que era de cuatro metros de diámetro y obedece a una socavación de un tubo de drenaje que ya estaba instalado en la zona”, informó José Luis Alarcón Ezeta, director del Centro SCT-Morelos.
De acuerdo con el funcionario federal, la SCT sabía de los daños que la tubería rota estaba provocando a la estructura de la vialidad.
“Durante los trabajos de la construcción del Paso Exprés no modificamos ni tocamos el tubo, a solicitud de los diferentes temas técnicos que teníamos aquí; porque había una alta presión de la socavación y de agua se empezó a hincar (sic) un tubo, entonces nos enfocamos a eso, para acabar con la obra de drenaje para dar paso al agua, desafortunadamente sucedió el agujero y colapsó el tema (sic)”, dijo Alarcón Ezeta.
Sin embargo, a pesar del daño estructural, el Centro SCT no alertó a los automovilistas ni cerró la circulación vehicular en el tramo.
“Lo que sí te puedo decir es que estábamos trabajando en el tema de este paso de agua por abajo de la autopista, que está a una profundidad de unos 10 o 12 metros y que, pues, como insisto, no lo habíamos tocado, pero vimos que se había colapsado, entonces empezamos la obra para repararlo. No se había detectado el colapso del tubo hasta que llegó el agua”.
La obra, a cargo de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, ha sido criticada, pues a su paso dejó decenas de afectaciones a los habitantes de Cuernavaca.
Tuberías rotas, drenajes y coladeras llenas con escombro, deslaves, inundaciones, viviendas dañadas en su estructura, bardas colapsadas y hasta socavones de menor tamaño que el de ayer son algunas de las afectaciones que la obra ha dejado.
Durante el banderazo de inicio de los trabajos, el 24 de enero de 2015, el Secretario de Comunicaciones y Transportes, Gerardo Ruiz Esparza, dijo que la obra sería concluida en 18 meses y que requeriría una inversión de mil 50 millones de pesos.
Sin embargo, los trabajos de ampliación de los cerca de 15 kilómetros de vialidad concluyeron en abril de este año, con un costo de dos mil 200 millones de pesos.
Los trabajos para rescatar a las víctimas -identificados como Juan Mena Romero, de 33 años, y Juan Mena Ruiz, de 65 años, ambos vecinos de El Capiri, del municipio de Emiliano Zapata-, que cayeron en el socavón, iniciaron antes de las 07:00 horas, con el apoyo de grúas, equipo técnico y maquinaria pesada.
En el lugar del percance, el Secretario de Comunicaciones y Transportes, Gerardo Ruiz Esparza, aseguró que el Paso Exprés tiene la certificación necesaria.
El funcionario federal comentó que el suelo se reblandeció y, debido a ello, surgió el socavón, al tiempo de anotar que se tenía como emergencia el rescate de los afectados, e inmediatamente después reparar, ya que la vía “va a seguir funcionando como lo ha hecho durante muchos años”, según puntualizó.
Aseveró que se deslindarán responsabilidades y, si hay alguna por parte de la empresa, ésta deberá afrontar su responsabilidad; señaló además que habrá un dictamen técnico para determinar qué sucedió y si hay una falla de construcción.
Los 10 carriles de la autopista permanecieron cerrados durante cinco horas y alrededor de las tres de la tarde la circulación fue reabierta parcialmente en ambos sentidos.
Cerca de las 16:00 horas dos carriles se mantenían abiertos al tráfico; trabajadores de la SCT alternaron el sentido de circulación, mientras que también continuaban las labores de rescate de las personas y del automotor que cayeron por el hundimiento.
Los dos pasajeros del vehículo permanecieron en el interior del socavón durante más de nueve horas; socorristas comenzaron a bajar con camillas al sitio donde cayó el auto y al lugar también arribó personal del Servicio Médico Forense (Semefo): el primer cuerpo fue recuperado a las 15: 27 horas y, el segundo, a las 15:34 horas.
Los brigadistas también sacaron del socavón el automotor en el que viajaban los hoy occisos, un Volkswagen Jetta, color gris, con placas de circulación HCS-5288 del estado de Guerrero.
Postura de la empresa
Por la noche, mediante un comunicado, la empresa Aldesa señaló que: “De acuerdo con el análisis previo, como ha señalado SCT, la afectación al tramo carretero, que obligó al cierre del cuerpo B (sentido Acapulco-México) del libramiento de Cuernavaca, fue ocasionada por la erosión de una alcantarilla afectada por el exceso de basura y una acumulación extraordinaria de agua provocada por las intensas lluvias. La alcantarilla y drenaje cruzan a más de 15 metros de profundidad por debajo de la autopista y no formaron parte de los trabajos realizados para la construcción del Paso Express de Cuernavaca. El drenaje se colapsó por el exceso de agua y provocó la grieta en la carpeta asfáltica”.