Cuernavaca, Morelos.- Al rendir su informe 2017 sobre la educación obligatoria en México, el Instituto Nacional de Evaluación de la Educación (INEE) dio a conocer que el rezago más grande en el terreno de los aprendizajes se observó en alrededor de la mitad de los alumnos de sexto de primaria, que tuvo un nivel de logro insuficiente en Lenguaje y Comunicación y 60% en Matemáticas.
Este martes, la directora del INEE, Sylvia Schmelkes del Valle, presentó su Informe 2017“La Educación Obligatoria en México” ante la Comisión de Educación Pública y Servicios Educativos del Congreso federal.
De acuerdo con dicho documento, la educación obligatoria ha avanzado en la expansión de la cobertura en mayores niveles de asistencia a la escuela en menores de entre tres y 17 años de edad, en tasas de deserción en declive y en mayores proporciones de egresados.
Pero cabe destacar que el mismo organismo da cuenta de que persisten “inequidades significativas que impactan en los contextos socioeconómicos con mayor deterioro”.
A través de un comunicado oficial, el instituto destacó que en el informe se advierte una asociación entre la calidad de los servicios y los contextos socioeconómicos. “Se puede constatar que estos últimos no son determinantes, ya que existen márgenes de acción para que las autoridades educativas superen esas limitaciones”, refiere.
Una de las poblaciones más vulnerables y en riesgo de exclusión es la de niñas, niños y adolescentes con discapacidad. Es necesario que la política pública se concentre en mejorar los sistemas de registro de la población discapacitada, adecuar los espacios físicos de las escuelas y dotar a los centros escolares de recursos humanos especializados, así como materiales y equipo indispensables para garantizarle una escolaridad digna a esta población, que registra aproximadamente 23.8% de analfabetismo, en comparación con el 4.7% nacional; y una escolaridad de 5.1 años, frente a 9.2 de la población total.
Respecto de la práctica docente, expone elementos sobre estrategias y acciones en al menos dos campos: “la formación continua y la mejora de las condiciones de las escuelas. En cuanto a los avances y desafíos de la estrategia de tutoría dentro de la política de inserción a la docencia, dada su novedad, se advierte todavía una importante distancia entre las normas y su implementación”.
En el caso de educación básica indígena, se concluye que “esta población enfrenta obstáculos importantes para acceder, permanecer y avanzar en el sistema educativo, lo cual se agrava por la poca pertinencia cultural y lingüística de la oferta educativa que reciben”.
En cuanto al abandono escolar, la tasa de deserción en educación media superior, que ha permanecido por encima de los 600 mil estudiantes en los últimos seis ciclos escolares, es la más alta en la educación obligatoria y se ha convertido en uno de los principales desafíos para el progreso del Sistema Educativo Nacional.
Lo más relevante del seguimiento a las “Directrices para mejorar la formación inicial de los docentes de educación básica” es la respuesta y la atención de las autoridades educativas locales, en comparación con la actuación que ha tenido la Secretaría de Educación Pública, pues, aunque dio respuesta a las mismas, no ha realizado acciones concretas.
Este informe constata que aun cuando hoy existen políticas públicas que atienden numerosos aspectos antes desestimados, el cumplimiento al derecho de una educación obligatoria de calidad para todos los niños y jóvenes del país sigue siendo una meta a cumplir cabalmente.