Cuernavaca, Morelos.- La Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) indicó que los militantes de los partidos políticos no tendrán afiliación simultánea a un partido nacional y un partido local, para evitar la simulación y padrones “inflados”.
Al resolver el recurso de apelación SUP-RAP-69/2017 y acumulado, promovido por el Partido Social Demócrata de Morelos, la Sala Superior confirmó el acuerdo INE/CG851/2016, por el cual el consejo general del INE estableció los lineamientos para la verificación de los padrones de afiliados de los partidos políticos locales para la conservación de su registro y su publicidad, así como los criterios generales para el ejercicio de los derechos de acceso, rectificación y cancelación de datos personales en posesión de los sujetos obligados.
Luego de que el PSD controvirtió el tema, la máxima autoridad electoral determinó que el derecho de afiliación es una prerrogativa establecida constitucionalmente, la cual se encuentra sujeta a diversas limitaciones previstas en la ley, que son necesarias en una sociedad democrática, por lo que resultaría contradictorio permitir la pertenencia de ciudadanos a diversos institutos políticos, porque la responsabilidad de los afiliados es contribuir de manera eficiente al desarrollo de sus partidos.
Señaló que aceptar la afiliación a partidos políticos locales y nacionales implicaría convalidar que ciudadanos pudieran participar en dos procesos internos para obtener la postulación a un mismo cargo, situación sobre la cual la Sala Superior se ha pronunciado en el sentido que no puede actualizarse, al resultar contrario a lo dispuesto por el artículo 227 párrafo cinco de la Ley General de Instituciones y Procedimientos Electorales (Legipe).
En sus argumentos, las magistradas y los magistrados de la Sala Superior establecieron que consentir la afiliación múltiple podría generar casos en que un partido político nacional, a través de sus militantes, obtuviera el registro de diversos partidos políticos a nivel local.
Es decir, esta doble afiliación pudiera generar afectaciones como simulación de militancia o inflado de padrones, además de que se incentivaría que la militancia no tuviera la representatividad, ni compromiso con la identidad de cada uno de los institutos políticos.
También coincidieron que permitir esta duplicidad generaría confusión y caos si una persona contiende por dos candidaturas, es decir una por un partido local y otra por un partido nacional.