¿Qué pasará por la mente de los 78 mil empleados que trabajan para la planta de Volkswagen en Puebla después de la renuncia Martin Winterkorns en Alemania, señalado como el responsable de truquear un software para manipular la emisión de contaminantes que se usó para ensamblar unidades en México y el resto del mundo?. Aunque los empleados en México desconocían que el software estaba manipulado, es un hecho que aquí se armaron 40 mil unidades con ese sistema, entre 2009 y 2015.

Volkswagen forma parte de la industria que atraviesa por su mejor época en México sus niveles de crecimiento hoy los presume el Gobierno federal, el valor de las exportaciones (9.398 millones de dólares) superaron a las petroleras (2,168 millones de dólares); la empresa alemana es una de las tres armadoras con mayor volumen de producción -Nissan, General Motors y Volkswagen- que han contribuido a que México se posicione como el cuarto exportador de automóviles a escala mundial.

México es una plataforma de producción y exportación estratégica para la empresa alemana, Volkswagen presume que su planta instalada en Puebla desde 1964 es la más grande de América del Norte. En este centro de producción trabajan 78 mil personas; de este total de plazas 18 mil son empleos directos y 60 mil indirectos; que ahora están es riesgo debido que Estados Unidos frenó la importación de vehículos de esta marca mientras termina las investigaciones por el fraude dectectado en los autos con motor diesel que le podría costar 18 mil millones de dólares.

Para aminorar un impacto negativo en México a causa de esta suspensión, el Gobernador de Puebla, Rafael Moreno Valle Rosas comprometió dinero del estado para la comprar 200 unidades que usará como patrullas y así evitar despidos en la planta. Respecto a los daños económicos para la empresa en México comentó que se conocerán los próximos días; en tanto hay datos no oficiales que apunta 2.6 millones de dólares diarios.

El trabajo de los 78 mil empleados de Volkswagen arroja una producción diaria de 2 mil 500 unidades, según reportó en uno de sus informes de México. Con este ritmo de fabricación la armadora está en posibilidades de enviar el 70 por ciento de su producción -42 mil 921 en agosto y 475 mil 121 el año pasado- al mercado exterior y quedarse con el resto para comercializarlo en su red de concesionarios distribuidos en la República Mexicana.

El secretario de Economía Ildefonso Guajardo adelantó que el escándalo que sacudió a la empresa alemana afectará en 26 por ciento las exportaciones que México envía a Estados Unidos, su socio comercial, al que le envía 73 por ciento del total de vehículos ensamblados en el país. El tamaño del impacto que adelantó el titular de la Economía se conocerá en octubre cuando la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA) emita su reporte mensual de producción, ventas y exportación.

El año pasado Volkswagen cumplió 50 años en México y para festejar su primera mitad de siglo lanzó una campaña que terminó en historias cortas transmitidas por televisión, el reto consistió en que los usuarios de la marca platicaran experiencias que mostraran lazos afectivos entre el automóvil, el cliente y la marca, y es que en cinco décadas han circulado por las calles de las distintas ciudades desde el modelo clásico volkswagen, la caribe, la combi, el Jetta, el Beetle y el Golf que han salido de la planta de Puebla.

La importancia de esta planta para la empresa con sede en Wolfsburg, Alemania es mucha, entre 2008 y 2010 la casa matriz decidió invertir mil millones de dólares para ampliarla y así iniciar la producción del Golf Variant. Un año después extendió su cartera de inversión en México al destinar otros mil millones de dólares para construir una planta de fabricación de motores en Silao, Guanajuato, misma que inició operaciones en 2013 con el trabajo de 700 personas, desde este centro de manufacturas Volkswagen tenía la proveeduría de motores para las unidades de Puebla y Chattanooga en Estados Unidos. Hasta este año la empresa reportó que en México alcanzó la producción de 11 millones de motores y la fabricación de 10 millones de automóviles.

La marca inició la venta de motores a diésel en México en 2004 y es justo en este tipo de automóviles donde se colocó el software truqueado; de las 11 millones de unidades que están bajo sospecha en el mundo, 40,000 circulan en México. Entre 2009 y 2015 estas unidades fueron incorporadas a la red de crestas que tiene la marca en el país. Además de su propia marca, Volkswagen tiene puntos de venta donde comercializa las marcas Audi (37), Seat (58), Bently (1) y Porsch (9).

Las autoridades en México: Secretaría del Medio Ambiente, de Economía, la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA) y la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) evalúan los daños para tomar las medidas que deriven.

Los 78 mil empleos, directos e indirectos que giran alrededor de la planta de Volkswagen en Puebla son poco más del doble de fuentes de empleo que genera el estado por sí solo en un año, el observatorio económico México ¿cómo vamos? da cuenta de que, el gobierno estatal genera en promedio 9 mil empleos por trimestre, equivalente a 36,000 trabajos en un año.

Así el fraude que solapó Martin Winterkorns desde Alemania puso al filo de la navaja el buen desempeño de las exportaciones del sector automotriz de México que en agosto de 2015 crecieron 3.5 por ciento respecto a las ventas al exterior del mismo mes del año anterior.