El presidente Andrés Manuel López Obrador descartó que la falta de gas que experimenta México sea un castigo contra su administración.
"No hay ninguna represalia de que no nos entregan gas porque no nos ven con 'buenos ojos', es porque es grave la situación que tienen en Texas", dijo en su conferencia de este miércoles.
El mandatario hizo referencia a la helada que ha ocasionado 'apagones' en esa entidad. De hecho, el operador de la red eléctrica de Texas señaló que podrían pasar días hasta que haya suficientes centrales eléctricas en funcionamiento.
La compañía eléctrica CenterPoint Energy también advirtió a los residentes que los apagones podrían durar varios días más.
Con consecuencia, México experimenta cortes al suministro de energía desde el lunes pasado, cuando seis entidades del norte sufrieron 'apagones'.
Ese día, López Obrador explicó que hay líneas de suministro de gas en Estados Unidos que se han visto congeladas por la temporada invernal. En ese momento, destacó la dependencia de México del gas estadounidense.
"La temporada invernal en Estados Unidos ha llevado a que se afecten algunas líneas instalaciones de gas y también al aumento en el precio del gas (...). Hay una dependencia de gas para las plantas en México, esto es lo que está ocasionado (los apagones), y (también) la mala temporada en el norte", comentó.
Ante la falta de gas, un insumo que se utiliza para generar energía eléctrica en México, el Centro Nacional de Control de Energía (Cenace) ha realizado cortes de energía durante dos días consecutivos.
Estos 'apagones' son una desconexión del suministro eléctrico que se realiza desde los Centros de Control con el propósito de mantener la estabilidad en el Sistema Eléctrico en alguna región del país y evitar un colapso.
Los cortes son ejecutados en forma escalonada y por bloques para que los usuarios no permanezcan por largos períodos sin el servicio de energía eléctrica.
Para resolver este problema, el mandatario señaló que ya se compraron tres barcos de gas licuado y que Petróleos Mexicanos (Pemex) le está vendiendo combustóleo barato a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) para generar más energía.