La Fiscalía General de la República (FGR) acusa al ex presidente Enrique Peña Nieto de encabezar y de jugar un papel central en la comisión de delitos de traición a la patria y cohecho en el caso Odebrecht, revela Reforma.
La FGR considera que Peña es el autor mediato de los delitos mencionados y los de carácter electoral. Es decir, que cometió los ilícitos utilizando como instrumento a Luis Videgaray, ex secretario de Hacienda y Exteriores, y a Emilio Lozoya Austin, exdirector de Petróleos Mexicanos (Pemex).
La Fiscalía afirma que el ex mandatario priista utilizó el cargo para el cual fue electo para cometer delitos.
Con su actuar ilícito no sólo obtuvo beneficio personal sino procuró “también el beneficio de la empresa Odebrecht quien los había ya hecho objeto de cohecho, traicionando a la patria con su mal desempeño”, indica.
Videgaray ya está señalado de haber distribuido -por indicaciones de Peña, “de manera espontánea y por interpósita personas”- 121 millones 500 mil pesos a los legisladores panistas Ernesto Cordero y Jorge Luis Lavalle; al dirigente partidista Ricardo Anaya y al legislador priista David Penchyna Grub.
Todo esto con el fin de obtener el voto en favor de la reforma energética sin atender los intereses que representaban sino sólo a su beneficio personal.
Bajo el liderazgo de Peña, Videgaray y Lozoya funcionaron “como un Estado dentro de un Estado e implementaron una política de actos de corrupción”, detallan.