A casi dos meses de que se lleve a cabo el sorteo de la “rifa” del avión presidencial, el director de Banobras, Jorge Mendoza, informó que las aeronaves más caras que oferta el Gobierno federal: el avión presidencial y el Gulfstream G-550 ya tienen intenciones de compra.
En conferencia, el funcionario explicó que si bien las aeronaves utilizadas por funcionarios en las pasadas administraciones no pueden ser ofrecidas con un precio menor al de avalúo, ya hay ofertas por las dos aeronaves más caras.
En el caso del TP-01, José María Morelos y Pavón, detalló que desde abril se tiene en proceso una oferta de 120 millones de dólares, equivalente a 2 mil 697 millones de pesos.
Como se ha indicado anteriormente, se concretarse el acuerdo sobre el avión presidencial, éste sería pagado en dos partes: una en efectivo y la otra en equipo médico que sería destinado a distintos hospitales del país.
En enero pasado se informó que de acuerdo con el director de Banobras, Jorge Mendoza, el avión presidencial se adquirió en el 2012 a un costo de 218 millones de dólares, equivalente a 2 mil 900 millones de pesos.
Sobre el Gulfstream G-550, aeronave construida en 2015 en Estados Unidos, Jorge Mendoza precisó que se cuenta con una oferta que mantiene un depósito de 2.5 millones de dólares.
De acuerdo con el funcionario, en ambos casos se revisa la documentación y el estado físico de las aeronaves.