México se acerca a la parte más difícil de la pandemia, aseguró la Organización Mundial de la Salud (OMS), un panorama que comienza a ser percibido en el país que ya registró el primer día de la pandemia con más de mil contagios el pasado 22 de abril. Aunado a esto, el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López Gatell, dio a conocer en su conferencia vespertina que se estiman que 8 de cada 10 mexicanos en estado crítico morirán a causa de COVID-19.
Las personas críticamente enfermas, que tengan insuficiencia respiratoria grave, requerirán tratamiento en terapia intensiva con soporte mecánico ventilatorio, es decir, intubación. Pero, el porcentaje de personas que podrían perder la batalla contra la enfermedad asciende entre el 70 y 80%.
“Ocho de cada 10 pueden fallecer durante la hospitalización a pesar del tratamiento y apoyo médico”.
Además informó que la letalidad del virus es alta, pues se mueve entre el 5 y 7%. Por ello, exhortó a la ciudadanía a no minimizar la epidemia porque el país atraviesa por un fenómeno “históricamente importante” que no había sido visto en el mundo desde la pandemia de influenza en 1918, hace más de cien años.
Explicó que fue ante este panorama que las autoridades sanitarias elaboraron lineamientos para el manejo masivo de cadáveres. “si tuviéramos un exceso de casos que saturen al Sistema Nacional de Salud (...) también (sucedería con) los sistemas convencionales de los servicios funerarios es su mayoría privados y los que existen en el sistema público”.
El subsecretario calificó a la pandemia de “extremadamente inusual” debido comportamiento acelerado que ha presentado en el país. Aunque apenas el pasado 21 de abril fue declarada la fase epidémica de la enfermedad, 24 horas después el registro de casos confirmados superó los mil infectados.
Hasta el momento, el país ha registrado 10 mil 544 pacientes contagiados y un total de 970 personas muertas por COVID-19, desde que comenzó la propagación del virus en México el pasado 28 de febrero.
Sobre los casos activos, es decir aquellos positivos desde hace 14 días, la Secretaría de Salud informó que llegan a los 3 mil 618. Su importancia radica en que impulsan, en buena medida, el desarrollo de la pandemia.
“Los casos activos son el motor de la epidemia, el resto son personas que se han recuperado y que no contribuyen a propagar la enfermedad”.
El aumento de los enfermos activos es de un 11.9%, de acuerdo con EFE, lo que representa un incremento de 443 personas. López-Gatell confirmó que la cifra de fallecimientos pasó de 857 a 970 en las últimas 24 horas, un total de 113 decesos más.
Las zonas metropolitanas como el Valle de México son los lugares donde se han registrado más casos. Otras ciudades con una actividad pandémica similar han sido Baja California, Tijuana y Mexicali, donde los números han ascendido considerablemente.
Sin embargo, de acuerdo con las tasas de incidencia, es decir, el número de casos nuevos divididos entre el tamaño de la población de un territorio definido, los lugares con mayores niveles son Ciudad de México, Tabasco y Baja California, mientras que Jalisco y San Luis Potosí se encuentran al final de esa lista.
El subsecretario también destaco una “extremadamente alta” frecuencia de enfermedades crónicas como diabetes, obesidad, hipertensión, todas asociadas con la mala alimentación.