Durante una audiencia de casación, los magistrados del Tribunal Superior de Justicia revocaron la sentencia de 50 años de prisión que un juez local había impuesto a estas dos personas.
Consideraron que no existían los elementos suficientes de prueba para inculparlos del delito por el que fueron juzgados.
El primer elemento fue que la supuesta víctima incurrió en contradicciones durante su denuncia inicial y durante su comparecencia ante el juez de la causa respecto a que no conocía a sus presuntos plagiarios, que más tarde dijo eran sus vecinos.
El segundo fue que la querella por el secuestro fue presentado al menos tres meses después de que habrían ocurrido los hechos.
Y finalmente que el ministerio público encargado de investigar el caso desarrollado en Yautepec, no recabó las pruebas mínimas, como es haber acudido al lugar donde se cometió el secuestro, donde la supuesta víctima estuvo en cautiverio así como testimonios de los posibles testigos de los hechos.
Sin embargo, los hermanos Santiago y Antonio Domínguez Vázquez, que junto con otros dos presos se habrían se fugado del penal de Atlacholoaya en enero del 2014, pero fueron recapturados en enero de este año en el Centro de Cuautla, permanecerán en prisión para purgar la condena de 15 años que estaban cumpliendo antes de evadirse.