Presuntamente exigían dinero a un mecánico a cambio de no hacerle daño a él ni a su familia y para no quemar su taller, que se ubica en el municipio de Tlaltizapán.
Zona sur.- Un juez calificó de legal la detención de dos jóvenes que presuntamente extorsionaban al dueño de un taller mecánico, a quien exigían dinero a cambio de no causarle daño a él ni a su familia ni a su establecimiento, que está ubicado en el municipio de Tlaltizapán.
Al respecto, la Fiscalía General del Estado (FGE) informó que se trata de quienes se identificaron como Luis Ángel “N” y Eduardo Leonel “N”, los cuales permanecerán en prisión preventiva debido a que presuntamente extorsionaban a un mecánico del municipio de Tlaltizapán.
Respecto de los hechos, se informó que fue el jueves 16 de julio del año en curso cuando la víctima solicitó apoyo a la Policía debido a que le estaban exigiendo –vía telefónica– dinero en efectivo a cambio de dejarlo trabajar.
Asimismo, la víctima reveló que fue amenazada con quemar su taller y asesinar a su familia si no entregaba la cantidad de dinero que le fue exigida.
Después, la tarde de ese mismo día, comenzó a recibir varias llamadas telefónicas y mensajes de texto de extorsión.
Derivado de la denuncia que realizó el individuo, agentes de la Policía de Investigación Criminal realizaron un operativo cerca del domicilio del agraviado.
Al sitio llegaron dos hombres; uno de ellos sacó un teléfono celular, con el que habría realizado una llamada y enviado mensajes de texto en ese momento. En seguida, el dueño del taller mecánico salió y les entregó algunos billetes.
En ese momento, el hombre que realizó la llamada le reclamó porque no entregó la cantidad acordada, al tiempo que sacó un arma de fuego con la que amenazó al agraviado, mientras que el otro hombre lo amenazó con una navaja.
Por ello, los agentes detuvieron a quienes son identificados como Luis Ángel “N”, de 26 años de edad, y Eduardo Leonel “N”, de 20 años, a los que presuntamente les decomisaron un arma de fuego de calibre .22, abastecida con ocho cartuchos, así como billetes de 500 pesos, un teléfono celular y un arma blanca.
Ahora los jóvenes están en espera de que se efectúe la próxima audiencia.