El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, encarará el viernes uno de los efectos más visibles de la crisis económica causada por la pandemia con la firma de un decreto para aumentar la ayuda alimentaria a millones de estadounidenses.
El nuevo presidente demócrata tomará esta iniciativa a la espera de que el Congreso vote el gigantesco plan de ayuda de emergencia para la economía de 1.9 billones de dólares presentado la semana pasada.
Se trata de dos decretos:
- El primero para incrementar la ayuda alimentaria a los millones de desempleados y a los que se apiñan en los bancos de alimentos
- El segundo para fortalecer los derechos sociales de los trabajadores federales.
Dos días después de su toma de posesión, el nuevo mandatario estadounidense continúa enumerando sus prioridades con decisiones presidenciales. En tres días, habrá firmado casi una treintena de decretos.
“Casi 30 millones de estadounidenses sufren por no tener suficiente para comer. Esto incluye a uno de cada cinco adultos negros y latinos, según la encuesta más reciente”, dijo Brian Deese, director del Consejo Económico Nacional de la Casa Blanca y agregó que un total de uno de cada siete hogares tiene dificultades para comer adecuadamente.
En un país donde las escuelas proporcionaban comidas diarias a los estudiantes de familias pobres, se estima que alrededor de 12 millones de niños tampoco tienen suficiente para comer.
Las colas para los comedores populares han aumentado y los bancos de alimentos están abrumados, incluso en los barrios acomodados de Washington.