Un nuevo video difundido en medios de comunicación generó polémica por la crisis migratoria que se vive en México, en él se observa a una mujer de Haití que se acercó al portón de entrada del albergue migratorio temporal en la ciudad de Tapachula, Chiapas, y acostada en el suelo suplicaba ayuda para ella y su hijo de forma dramática además de que acusaba las fallas al interior del albergue.
La mujer aseguró, suplicando y llorando, que tenía 10 días en el lugar y señalaba la desatención de las autoridades con los extranjeros por lo que la mayoría estaba desesperado por conocer su situación y mejorar su estancia en el país.
“Ayúdame mi hijo está enfermo, ¡ayúdame, ayúdame, ayúdame por favor!”, suplica a gritos la mujer; además, con llanto externa que necesita hablar con su familia.
Otros migrantes permanecían sentados, acostados y otros tirados sobre el piso gritando “¡Libertad, Libertad, libertad!”.
Según comentaron fuentes del Inami a Efe, la situación no fue más que un “alboroto” fruto del nerviosismo tras días dentro del centro, y no pasó a mayores.
Unos 100 migrantes africanos y haitianos se amotinaron ayer martes en el albergue migratorio en demanda de atención médica, alimentación y agilización de trámites migratorios.
Los migrantes intentaron, por tercera ocasión en este mes, escapar de la instalación, una extensión de la estación migratoria Siglo XXI, pero fueron contenidos en la puerta principal por agentes
de la Guardia Nacional, del Instituto Nacional de Migración (INM) y de la Policía Federal.
La demanda de los extranjeros es dejar la instalación por falta de alimentos, atención médica -principalmente a madres y menores- y denuncian el retraso en sus documentos migratorios.
Autoridades migratorias aseguraron que los migrantes disponen de doctores y alimentos.
Desde los últimos cuatro meses del 2018 se ha incrementado la entrada a México de migrantes de varias nacionalidades por la frontera sur con Guatemala, principalmente de países de Centroamérica, de Haití, Cuba y África.
Ante el aumento del número de migrantes irregulares y de solicitantes de asilo que llegan a Estados Unidos, el presidente de ese país, Donald Trump, amenazó el 30 de mayo pasado con imponer aranceles a todos los productos mexicanos.
Tras una semana de negociaciones en Washington, el 7 de junio se anunció un acuerdo que prevé el envío de 6,000 miembros de la Guardia Nacional de México a la frontera sur, entre otras medidas
para contener la migración. A cambio, Estados Unidos retiró la amenaza de las tarifas.