Partido muy disputado en el que este equipo llega tras haber militado en la ONEFA, y que resultó ser un buen sinodal para los Mandriles quienes llegaron a la defensa de la corona de su título obtenido en la edición pasada, fue una lucha pareja en el emparrillado de juego, en la que se estaba destacando el trabajo de ambas defensivas que no permitieron grandes cosas a los ofensivos en la primera parte de la confrontación, terminando con un aguerrido empate en ocho unidades, confrontación donde los dos equipos ofrecieron una gran resistencia de no permitir más puntos en su zona de anotación, y ello obligaba a una lucha de estrategias en el descanso donde ajustaron sus filas y buscaron las mejores opciones para conseguir los puntos necesarios y alcanzar el triunfo de este duelo.
La anotación por parte de los morelenses fue de 15 yardas, obra del mariscal de campo Enrique “Kike” Remis quien en una jugada personal logra burlar la defensiva local y alcanzar el objetivo de llegar a la zona prometida, con una jugada de conversión de Erick Prado en una escapada por el centro de tres yardas que logra la igualada ante los anfitriones a ocho puntos.
La diferencia de la victoria, llegó en la parte final del encuentro, donde pese a tener el tobillo hinchado tras un pisotón, logra conectar un gol de campo de más de 35 yardas por parte de Yared Andrew Casillas, para darle los tres puntos que al final significaron el triunfo para los Mandriles, triunfo bastante estimulante para la planilla, quienes se alistan para regresar de nueva cuenta a este escenario y enfrentar ahora al conjunto de los Spartans de Ojo de Agua en otro duelo bastante complicado dada la competitividad del rival.