Ayala.- Alrededor de seis toneladas de mojarra tilapia resultaron muertas por causas hasta ahora desconocidas, estimaron biólogos, químicos e ingenieros que ayer se dieron cita en la Presa El Gigante para iniciar los preparativos para la limpieza del lugar, a fin de evitar un problema de salud pública.

En tanto concluyen los estudios por parte de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) para determinar la causa de la muerte masiva de peces, en las inmediaciones de la Presa El Gigante dieron inicio los trabajos para llevar a cabo el retiro y saneamiento del agua de ese vaso lacustre.

Personal de la Comisión para la Prevención de Riesgos Sanitarios del Estado de Morelos (Coprisem), así como de Protección Civil, Desarrollo Agropecuario y Salud del municipio de Ayala, se dieron a la tarea de rascar varias fosas para depositar en ese lugar los peces muertos.

“Estamos esperando los resultados de la Conagua para saber exactamente lo que sucedió, estamos esperando que venga el representante de Asurco, porque si vamos a proceder, quien haya cometido este error vamos a proceder contra él, porque no se vale”, señaló Raúl Torres Benítez, representante del comisariado ejidal de San Pedro Apatlaco.

El dirigente campesino confirmó las perdidas, las cuales dijo, podrían ser mayores a la afectación de las tierras de cultivo, “están afectando no tanto la pesca de los vecinos, lo importante es que nos están afectando a los ejidos de abajo, que son siembras de  caña de azúcar, ejotes, hortalizas y esta agua tarde o temprano va a perjudicar”, añadió.

Por su parte, Humberto Bueno Rendón, director de Salud de Ayala, afirmó que pese a la muerte cuantiosa de peces, no se puede calificar de un ecocidio, debido a que no fueron afectadas otras especies animales.

Destacó las labores que se llevan a cabo para remediar: “las medidas que empezamos hoy, tenemos el trascabo haciendo fosas para que la misma gente nos apoye a retirarlos del agua y en la medida que podamos los vamos a enterrar y encalar, así como verter cal en el agua para que se empiece a purificar. Comentando con Coprisem y tomando las medidas pertinentes, lo más ideal serían dos lanchas con chinchorros para empezarlos retirar todos”, indicó.