Cerca de las 7 horas, los padres inconformes se apostaron en los dos accesos de la escuela, con la intención de impedir el paso de la trabajadora y del director Valentín Vega Escobar.
Fue cerca de las 9 horas, en el momento en que el director y un grupo profesores se encontraban en la esquina suroriente del plantel, cuando dos padres de familia rompieron los candados, apoyados por herramientas de trabajo, y llamaron a estudiantes a ingresar a la escuela.
El pasado 27 de octubre los padres de familia ya habían denunciado la situación al interior del plantel e incluso reiteraron la petición por la presencia del esposo de la conserje, al señalar “tememos por la integridad de nuestros hijos, es una persona ajena a la escuela que no debe permanecer en el interior”.
El presidente del Comité de Padres de Familia, Alberto Millán Reyes, dejó claro que no existe inconveniente alguno con la plantilla docente, “el problema es con la conserje Alicia, ya que su esposo de nombre Vicente está todo el día dentro de la escuela, entra y sale sin que nadie le diga nada, a pesar de ser ajeno a la institución”.
Y reiteró “no queremos problemas con nadie, sólo pedimos que se vaya la conserje y su esposo, que se vaya la gente ajena a la institución”, estableció.
A pesar de que había padres de familia afines al director y que apoyaban también a la conserje, sólo se dieron intercambio de palabras que no pasaron a mayores.
“La petición que tenemos es clara y con fundamento, lo que pedimos fue que el director impidiera el paso al esposo de la conserje, quien además se dedica a la venta de dulce, siendo que los menores se gastaban en ello el dinero que se les da y al momento de recreo ya no tenían para comprar sus alimentos”.
Además se vertieron acusaciones de parte de los padres de familia, “porque ponen a nuestros hijos a realizar labores de limpieza y ventas, cuando deberían de estar tomando clases o en el esparcimiento del recreo”.
El director intentó desvirtuar el movimiento, señalando que uno de los inconformes no era padre de familia, señalando “su esposa es la mamá, pero él no es tutor”.
Además acusó al comité de crear conflictos, pero los padres de familia denunciaron que se les ha impedido acceder a la escuela, cuando han pretendido realizar mejoras a butacas y otros equipos.
Posterior a ello, se llevó a cabo una reunión de trabajo que encabezó el supervisor de la zona 64 Julián Reyes Jáuregui, padres de familia y personal de la escuela, donde se determinó dar prioridad a la integridad de los menores y hacer los cambios.