De acuerdo a Jaime Martínez Rivera, actual vicepresidente del CPHC, una de las posibilidades por las que la cápsula se perdió es que pudo no haber sido colocada y quedarse con Paz Matilde Osorio, profesora cuautlense, tras haberla recibido de los representantes del CPHC. Según esta versión, ella debía entregar el objeto a los encargados de la rehabilitación que tuvo la plaza en esa época, cuando el monumento de Morelos fue reinstalado allí, aunque pudo haber malinterpretado los hechos y creer que se trataba de un obsequio personal, quedándose con él.
Jaime Martínez consideró que, lo que sea que haya pasado, en lugar de centrarse en recuperar el objeto extraviado, el CPHC buscará rehacer una nueva cápsula con la colaboración del ayuntamiento municipal y de los encargados de la rehabilitación actual de plaza.