Cabe señalar que con recursos propios de los estudiantes de la Normal Urbana Federal Cuautla, cada quien aportó su cooperación para la gasolina de la camioneta Urvan, propiedad de la institución educativa, que los transportó a la colonia Ampliación Galeana donde se ubica el relleno sanitario “La Perseverancia”; los normalistas se llevaron el conocimiento y despejaron sus dudas sobre el tratamiento que se le da a la basura, así como del proceso para la obtención de agregados que se logran con los desperdicios y los beneficios que se obtienen de estos.
La maestra María de la Luz Sotelo Quiroz, encargada de la materia de biología, señaló que la visita a este centro de confinamiento de desperdicios, se debió a que se encuentran cursando una unidad de aprendizaje con los estudiantes normalistas, donde el alumno tiene que desarrollar situaciones de solución para la contaminación ambiental, además de proponer proyectos e ideas nuevas para encontrar alternativas para detener o disminuir la polución.
Para lograr buenos resultados y obtener mejores perspectivas de lo dañino que resulta el contaminar el medio ambiente tanto para el planeta como para los seres humanos, se determinó conocer la realidad en carne propia, donde el estudiante conozca de cerca cómo se trabaja en un relleno sanitario, centro de confinamiento de todo tipo de desechos, con lo que se pretende conocer el proceso del tratamiento que se le dan a estos desperdicios; cómo se recicla o controla la basura y los lixiviados para evitar contaminar, expuso Sotelo Quiroz.
Destacó que conociendo la realidad y bajo esta perspectiva de cómo contaminar menos y cómo tratar la basura, los estudiantes se tendrán que sensibilizar y volverse factores multiplicadores con sus futuros alumnos a los que deberán de concientizar sobre este creciente problema de índole mundial como es la contaminación. Ellos ya llevan la teoría, el proceso y la forma de aplicar métodos para evitar la contaminación, propuesta técnica que deberán aplicar en las aulas, en sus prácticas profesionales y posteriormente con sus discípulos, refirió la mentora.
La catedrática reconoció que la mayoría de los alumnos que visitaron el relleno sanitario se quedaron sorprendidos, porque desconocían la funcionalidad del centro de confinamiento, pero al conocerlo se motivaron y quisieron aprender más sobre lo que se logra con el tratamiento de la basura y sus beneficios adyacentes. “Ahora quieren ver cómo se utiliza la basura, cómo se biodegrada, cómo se logra y extrae el biogás, cuántos trabajadores hay, a quién beneficia la obra y cómo producen energía eléctrica”, agregó la profesora.
Por su parte, algunos alumnos expresaron que esperaban encontrarse con montones y cerros de basura, pero descubrieron un lugar bien organizado, con olores controlados, con la grata sorpresa de que la basura produce otros beneficios como el reciclado de algunos productos como el Pet, cartón, vidrio, plástico, abono de composta para los viveros y campos, biogás y energía eléctrica. “Estamos sorprendidos con la explicación del proceso de cómo nace y crece un relleno sanitario, de cómo avanza para producir otros productos y de cómo terminará cuando se clausure definitivamente, donde primordialmente se busca el beneficio del medio ambiente y la protección de los sistemas ecológicos, ya que cuando menos, tendremos la idea de no generar más desechos porque complica nuestro medio ambiente”, expresaron algunos normalistas.