De acuerdo a los sellos colocados en la construcción, la medida se tomó por “infringir la Ley de Aguas Nacionales”.
Consultados al respecto, el director de Obras Públicas Municipales, Fernando Andrés Mazón, sostuvo que en su momento “fuimos notificados sobre esta acción de clausura, para la cual la Conagua se basó en una denuncia ciudadana, señalando que el albergue descarga aguas residuales al cauce del río Cuautla, además de que estaría invadiendo una zona federal”.
Empero, añadió que “el personal de la dependencia llegó sin antes habernos solicitado un informe sobre la construcción, de lo contrario se hubieran podido dar cuenta que no se está infringiendo ninguna ley”.
Con ello rechazó violación alguna a la norma y estableció que “el agua va directamente a la red municipal, a donde también van a parar las conexiones de los baños de la unidad deportiva y de otro albergue”.
Aseguró que tampoco se está invadiendo alguna zona federal: “se proporcionó a la comisión una copia del decreto del 24 de septiembre de 1956, que es cuando se dotó de esta superficie al ayuntamiento”.
“La Conagua dio un plazo de cinco días para entregar toda la documentación avalando lo dicho, acción que se realizó a tiempo, estando en estos momentos en espera de la resolución de la Comisión para ver a qué se procede”.