De inicio el grupo de manifestantes rechazó las acusaciones de sus detractores, en el sentido de que el ayudante municipal ha incurrido en abusos de autoridad, despojo de terrenos y amenazas; y aseguraron que por el contrario, son los integrantes y seguidores de la familia Marcelino quienes se han dedicado a apoderarse de los terrenos de la localidad.
A nombre de sus vecinos, Rosa María García señaló que acudían a exigir al presidente municipal la restitución de su ayudante municipal, debido a que no se le dio oportunidad de defenderse, pues el cabildo actuó bajo la presión del grupo de presuntos caciques de la comunidad.
El grupo de manifestantes dijeron que dicha familia desde que tuvo la oportunidad de tener a uno de sus integrantes como ayudante municipal, han tratado de perpetuarse en el poder, para lo cual han pasado por encima de los derechos y propiedades de los fundadores de dicha colonia también conocida como “El Chivatero”.
Demandaron al ayuntamiento que obligue al grupo opositor al ayudante a regresar los terrenos destinados a áreas verdes, ya que los tienen invadidos para después comercializarlos.
Una comisión fue atendida por el director general de gobierno Lino Alejandro Meza Peñaloza y por el contralor municipal Arturo Reynaldo Abúndes. En dicha reunión salieron a relucir presuntos despojos de terrenos por integrantes de ambos bandos, por lo que los funcionarios pidieron prudencia y tener visión de comunidad para evitar una confrontación violenta. Mientras tanto, su pliego de demandas será presentado al cabildo para su análisis y atención.