La caravana proveniente de Oaxaca, integrada por padres de los 43 estudiantes desaparecidos de la Normal Rural “Raúl Isidro Burgos”, arribó la madrugada del martes a esa comunidad del municipio de Temoac, donde se reunieron con diversas organizaciones sociales y estudiantiles de la entidad, en un mitin realizado en el centro de la comunidad de Amilcingo.

Entre los asistentes a esta concentración se encontraban estudiantes de la Normal Rural “Emiliano Zapata” de Amilcingo, de la Normal Urbana de Cuautla, miembros del Frente Juvenil Tepoztlán, del Frente de Pueblos en Defensa del Agua y de la Tierra, de la Comisión Independiente de los Derechos Humanos (CIDH), del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME), jubilados y diversos colectivos.

Los integrantes de la caravana “Daniel Solís Gallardo” dijeron que se han cumplido 54 días de la desaparición de los normalistas de Ayotzinapa, sin que hasta ahora el gobierno haya podido encontrarlos, por lo que dijeron desconfiar de las instituciones y sus acciones de búsqueda.

Al mismo tiempo rechazaron las manifestaciones violentas que se han registrado, en las que se ha atentado contra edificios y oficinas de gobierno, “nunca hemos ido a patear una puerta, pero si no nos provocan responderemos”, dijeron. Acusaron de dichos disturbios al propio gobierno para desprestigiar sus movilizaciones.

También denunciaron que durante el trayecto de la caravana, se han registrado acciones de hostigamiento, presión y comportamientos ofensivos. Por su parte, familiares de José Luis Luna Torres también denunciaron que el gobierno de Morelos sólo ha jugado con sus sentimientos, sin contribuir a la búsqueda de su familiar.

Manifestaron que los actos de hostigamiento los han recibido a su paso por el estado de Guerrero y Oaxaca, pues aseguran que desde el estado de Oaxaca fueron detenidos por gente sospechosa que los desvío del camino.

Durante el mitin con organizaciones civiles de Morelos en Amilcingo, los integrantes de la caravana dejaron claro que el objetivo principal de su lucha es exigir la aparición con vida de los 43 normalistas, además de que se resuelvan los miles de casos de desaparición forzada, actos de represión contra el pueblo organizado “porque no queremos más miedo, ni más sangre”, aseveraron.