Fue un grupo de participantes del curso de comunicación Riesgo en Salud Ambiental que el INSP realiza, con el propósito de certificar a especialistas promotores de la salud desde el punto de vista ambiental.
Parte de su formación consiste en visitar centros de confinamiento de basura como éste, con el fin de evaluar y conocer cuáles son los posibles riesgos potenciales en México derivados del mal manejo de los desechos urbanos. “Un grave problema que tenemos en el estado y el país desde hace varias décadas”, señaló la titular del Curso de Comunicación Riesgo en Salud Ambiental.
Entre los visitantes estuvieron especialistas de varios países de Latinoamérica, principalmente de Colombia, Chile, Perú, Paraguay y México, quienes realizaron un recorrido para conocer todas las fases del confinamiento de basura, desde la llegada de los camiones, hasta la producción de biogás.
“Muchos de nosotros quedamos impactados durante el recorrido por la gran cantidad de residuos que llegan y como son mezclas de residuos orgánicos y residuos sólidos. Si nosotros cambiáramos los hábitos desde la familia, que desde casa se pudieran separar los residuos, no tendríamos este problema de separación”, afirmó la especialista.
Consideró que el manejo de la basura es un problema que no se ha resuelto. “Es un problema que nuestro país vive y seguirá viviendo porque a medida que crece la población, la generación de residuos crece mientras que la población no maneje de forma apropiada la generación de ellos”, apuntó.
Aseguró que el problema de los residuos se tiene que resolver desde los gobiernos y desde las casas, mediante la separación residuos orgánicos y sólidos, así como mediante un consumo sustentable que elimine productos como los plásticos que tardan años en degradarse.
Reconoció la necesidad de tener más especialistas en el tema para atender los problemas de contaminación al ambiente, derivado de la proliferación de tiraderos a cielo abierto.