El organismo, dependiente de la Secretaría de Gobernación, destaca que aproximadamente el 10% de estas exhalaciones ha mostrado un componente explosivo menor, sin que se observe la emisión de fragmentos hacia las laderas del volcán.
Al mismo tiempo, informa que también se han registrado episodios de tremor armónico durante dos minutos, así como de alta frecuencia durante un minuto, ambos tipos con baja amplitud. Agrega que este tipo de actividad, se ha observado anteriormente durante el crecimiento de domos en el interior del cráter y está considerado dentro de los escenarios contemplados en el nivel de alerta Amarillo Fase 2, por lo que no es necesario modificar el nivel del Semáforo de Alerta Volcánica.
El Cenapred informó que el Semáforo de Alerta Volcánica se encuentra en Amarillo Fase 2 e hizo especial énfasis en las siguientes recomendaciones: Continuar con el radio de seguridad de 12 kilómetros, por lo que la permanencia en esa área no está permitida; mantener tránsito controlado entre Santiago Xalitzintla y San Pedro Nexapa, vía Paso de Cortés, y a las autoridades de Protección Civil exhorta mantener procedimientos preventivos, de acuerdo con sus planes operativos.
Al respecto Jesús Hernández Mendoza, titular de la Oficina Regional del Instituto Estatal de Protección Civil en Tetela del Volcán, informó que se mantienen los recorridos por todas las comunidades cercanas al volcán para detectar la posible caída de ceniza, lo cual no ha ocurrido hasta ahora, debido a que los vientos se han dirigido predominantemente hacia el estado de México.
Sin embargo, dijo que se está informando continuamente a los habitantes y a las autoridades locales acerca del comportamiento del Popocatépetl, a fin de que asuman las medidas de prevención que ya se les han dado a conocer con anterioridad.
Agregó que “un tremor armónico es una señal sísmica característica de los volcanes que refleja cambios en su estado interno. Cierto tipo de tremores se han asociado a desplazamientos de magma en el interior de un volcán, por lo que representan uno de los precursores significativos para definir los estados de alerta volcánica”.