Mientras tanto los comités vecinales que fueron integrados para recorrer las comunidades, a fin de levantar un censo de los daños que sufrieron las viviendas y las pertenencias de las familias, continúan haciendo sus verificaciones.
De la misma manera, los productores de nopal y aguacate apoyados por algunos funcionarios del municipio siguen reportando los daños que sufrieron sus plantaciones, con la intención de conseguir apoyo por parte de las autoridades estatales.
Durante la reunión sostenida por el presidente municipal Paulino Amaro Meza, con vecinos de la comunidad indígena de San José de los Laureles, una de las más afectadas mencionó que debido a que se atravesaban los días jueves y viernes santos, sábado de gloria y el domingo de pascua, sería hasta la semana siguiente cuando se reunieran para hacer el balance respectivo.
Mientras tanto, los habitantes afectados continúan resolviendo las afectaciones que tuvieron por cuenta propia, pues la mayor parte de las familias resultaron damnificadas al colapsarse el techo de sus casas. Lo anterior, provocó que con la humedad la mayoría de sus pertenencias resultaran echadas a perder.