De acuerdo con información dada a conocer por el Instituto, “es un grupo multidisciplinario conformado por médico, enfermera, nutrióloga, trabajadora social y el estomatólogo, quienes, a través de pláticas educativas y de orientación, tratan de incidir en el cambio de hábitos, sobre todo en los alimenticios”.
Las sesiones son una vez al mes, el enfermo debe estar consciente de que debe invertir tiempo y voluntad para cumplir con las indicaciones benéficas para su salud y que, por ende, coadyuvarán a una mejor calidad de vida.
El requisito que debe cumplir al diabético para formar parte del “Diabetimss” es tener menos de diez años con la enfermedad y todavía no manifestar ninguna de las complicaciones que desencadena (en el sistema circulatorio, en la vista y en los riñones, entre otros).
En “Diabetimss” se vigila la salud bucal, el estado nutricional y se da la información necesaria para que el diabético conozca los síntomas y complicaciones de la enfermedad, al mismo tiempo que se le enseña las acciones a emprender para evitar y/o retardar el daño.
Aunque se observa un poco de resistencia al cambio, el paciente se convence y se integra con agrado al control y vigilancia del módulo. De acuerdo con la experiencia, el convencimiento es cuando empieza a experimentar favorable impacto en su salud, ya que empiezan a descender los niveles de glucosa en la sangre.