La situación es calificada de grave, pues se estima que de las alrededor de siete mil microempresas que se tienen identificadas en la región oriente, el 50 por ciento se encuentran en cartera vencida. Por ello solicitarán, a los gobiernos estatal y federal, el establecimiento de un Fondo de Contingencia que evite una mayor crisis en este sector.
Al mismo tiempo, pidieron al nuevo gobierno del estado una investigación para conocer el monto y el destino del Impuesto a la Nómina que el anterior gobierno les estuvo cobrando, supuestamente para la realización de proyectos de fomento al turismo y al comercio, los cuales nunca se hicieron realidad, al menos en esta zona de la entidad.
Dijeron que se estima que el monto de dicho impuesto podría ascender a los 280 millones de pesos, con lo que se podría apoyar, mediante financiamientos, a las micro, pequeñas y medianas empresas.
El presidente del Consejo Empresarial de Cuautla y la Región Oriente, Miguel Leana Vélez, señaló que los comerciantes y microempresarios se encuentran desamparados, pues al no tener acceso a los financiamientos bancarios, recurren a las empresas prestamistas que proliferan en la región, las cuales ahora los ahogan con el cobro de altos intereses. “Hay alrededor de 60 empresas disfrazadas de financieras, que prestan dinero en condiciones desventajosas”, indicó.
Agregó que como empresarios, pedirán al gobierno estatal el establecimiento de un programa de rescate para este tipo de empresas, para evitar su cierre, pues al final son las que generan más fuentes de empleo, tan necesarias en la región.