A partir de las 7:00 de la mañana, el grupo de inconformes se colocó a mitad de un carril de dicha carretera para exigir la presencia de las autoridades educativas para solucionar los problemas de maltrato y desatención hacia los niños por parte de maestros y la directora, así como solución a las malas condiciones de los baños, dormitorios y la cocina donde se preparan los alimentos, los cuales aseguran se dan en malas condiciones de higiene, situaciones que han tratado de acreditar con fotografías.
Los manifestantes fueron conminados en reiteradas ocasiones a desbloquear la carretera por parte de la Policía Federal, sin embargo, los padres inconformes continuaron con su manifestación, obligando a que el tránsito vehicular se encauzara en un sólo carril.
Al plantel arribaron por separado representantes de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Morelos (CDHEM), encabezados por Manuel Hernández Franco y el subdirector de Educación Primaria, Javier Bahena Cárdenas, para realizar un recorrido de supervisión en el plantel y constatar las denuncias.
Por su parte, la directora del plantel, Margarita Garduño Contreras, reconoció que existen colchones y sábanas en mal estado, las cuales van a reponer a la brevedad pues ya han sido autorizados por el IEBEM; sin embargo, aseguró que es mentira que a los niños se les dé comida en mal estado o que se les maltrate. Al cuestionarla acerca de las fotografías donde aparece un niño atado a la butaca, pidió no ser ella quien responda a ello, sino la mamá y el propio niño, “pues es una situación que no me corresponde a mí decirla sino a ellos. Pero le puedo asegurar que no se trata de ningún maltrato, ni algún castigo por mala conducta”.
La madre y el niño de la fotografía no acudieron este lunes al plantel al conocer que sería tomado por el grupo de inconformes. Para la directora, el fondo de las acusaciones es el problema que el Comité de Padres de Familia tiene para rendir cuentas de 18 mil pesos de cuotas que no saben explicar dónde quedaron, “pues ellos denuncian muchas deficiencias en la escuela, pero ellos nunca han hecho nada para solucionarlas con el dinero de las cooperaciones que para eso las pidieron”, afirma.
Por su parte, Manuel Hernández Franco, titular de la Segunda Visitaduría de la CDHEM, dijo que ha realizado varias visitas sorpresa al plantel para verificar las irregularidades denunciadas, pero únicamente encontró que el cuarto donde se guardan los colchones está en pésimas condiciones, lo mismo que los baños; “pero en cuanto a la cocina, hemos visto que los alimentos están bien conservados, no están caducados; incluso vimos que les dan abundante de comer”, indicó. Apuntó que la CDHEM analizará de manera imparcial la situación para emitir las recomendaciones pertinentes.
Entrevistado durante el recorrido por la escuela, en donde platicó directamente con los niños, el subdirector de Educación Primaria, Javier Bahena Cárdenas, dijo que sí existen muchas carencias en el plantel, sobre todo de mantenimiento, pero acerca de las denuncias hechas por el grupo de inconformes pudieron verificarse que no son ciertas. “Las denuncias que hicieron, no existe tal cosa; denunciaron conductas irregulares de la directora, lo cual no ocurre, no hay ninguna (queja) real que haya escuchado ahorita de los niños o los padres de familia. Acusaban que la comida estaba echada a perder; la alimentación que se da es adecuada, es limpia, está muy bien; hablaron de que había un hoyo en el vestidor de las niñas: no existe tal cosa; que las estructuras de las literas estaban sujetas con cinta… no hay nada”.
Reconoció que los colchones están en deficientes condiciones por el uso y los años, pero éstos serán cambiados derivado de la autorización hecha por el secretario de Educación y el director del IEBEM. “Se envían colchones para todos los niños y se envían computadoras para que tengan acceso a esta herramienta tecnológica.”
Durante la visita, un grupo de madres de familia se dio a la tarea de barrer los patios y de recoger la basura que abundaba por todas partes. Al finalizar, por unanimidad de los padres de familia, se quitaron las cadenas y se abrieron las puertas de la escuela para normalizar las actividades.