Los malos hábitos de vida inician desde temprana edad y como ejemplo, alrededor del 28 por ciento de los adolescentes consumen frituras y refrescos diariamente, además de que pasan sentados muchas horas frente al televisor, la computadora o entreteniéndose con juegos electrónicos.
Asimismo, el 17 por ciento de los niños ingieren alimentos pocos nutritivos, casi desde recién nacidos, explicó Antonio Rosales Piñón, coordinador de Programas Médicos de Prevenimss.
De acuerdo a la encuesta Encoprevenimss, en la que se evaluaron aspectos de nutrición, sobrepeso y obesidad, el segmento de la población más sedentario (que no realiza ninguna actividad física) lo representan los adultos mayores, pero éstos en su mayoría comenzaron a los 45 años de edad o antes a tener problemas de salud por falta de ejercicio y es al llegar a los 60 años cuando la diabetes, la hipertensión y las enfermedades cardiovasculares hacen su aparición.
La importancia de realizar ejercicio radica en que el adulto mayor tenga más fuerza muscular y movilidad, así como mantener el peso adecuado, con lo que va mejorar el trabajo del corazón regulando la presión arterial y disminuyendo la probabilidad de tener infartos y algunos tipos de cáncer, principalmente de colon.
Por último el especialista del IMSS señaló que practicar deportes como caminata, trote, bicicleta o natación, también ayudará a disminuir la tensión nerviosa.