Con motivo de los actos conmemorativos por 200 años del Ataque y Sitio de Cuautla de 1812, se realizó de la capilla de El Calvario y el acueducto que sirvió de fortín durante los 73 días de batallas entre realistas e insurgentes.
Aunque el Código Penal para el Estado de Morelos establece pena carcelaria de seis meses a un año, de 15 a 30 días de trabajo a favor de la comunidad y de veinte a cincuenta días-multa, las pintas en la ciudad son constantes en todo tipo de edificios.
El hecho trasciende precisamente cuando las autoridades de Cuautla realizaron un reconocimiento a los jóvenes “Emulantes”, encargados de llevar a cabo el rescate de los espacios y otras actividades de apoyo en el bicentenario.
El grupo de “Emulantes” “son jóvenes activistas, quienes se sumaron de forma decidida a diversas tareas durante los festejos conmemorativos del bicentenario”, aseguró Fernando Campos Garduño, secretario técnico de la Comisión de Festejos del Bicentenario del Ataque y Sitio de Cuautla.
Las pintas que han aparecido en este espacio, fueron localizadas muy cerca del molino de arroz Buenavista, prácticamente donde termina el histórico acueducto.