Un primer acontecimiento se registró alrededor de las cuatro de la tarde en Jonacatepec, cuando Antonio Castillo Rivera, gente del equipo del candidato del Partido de Trabajo (PT), Marcos Aragón Reyes, le echó la camioneta a Gabriel Infante Pastrana, candidato del PSD a la alcaldía, quien, aprovechando las influencias por haber sido secretario del Ayuntamiento, logró que lo detuvieran.
Eso originó una confrontación entre seguidores de ambos bandos que amenazaba con complicarse, pues los dos aseguraban ser los ofendidos.
Poco más tarde, en la comunidad de Jumiltepec de Ocuituco, el conductor de un vehículo oficial del DIF municipal, presuntamente, bajo los efectos del alcohol, atropelló a tres menores que eran llevados a participar en un mitin del candidato del Partido Verde Ecologista de México (PVEM) a la alcaldía, Juan Carlos Flores Espinosa, dejándolas gravemente lesionadas. Inicialmente algunos vecinos trataron de politizar el accidente, acusando a miembros de un partido político del hecho.
Luego de los hechos, ocurridos al filo de las 19:00 horas del domingo, Jocelyn Vargas Romero, Antonio Villalba Vargas y Karina Vargas Romero, de 12, diez y cinco años, respectivamente, fueron llevados al Hospital del Ángel, donde se diagnosticó posible pérdida de una extremidad inferior para Karina. Aunque, un nuevo estudio, el cual trascendió el lunes al mediodía, reveló la posibilidad de salvarlo.
Los menores fueron arroyados por la camioneta oficial que era conducida por quien posteriormente fue identificado como Rodrigo Rivas López –quien está en nómina como chofer del DIF municipal–, el cual no pudo esquivar a los menores debido a que conducía con exceso de velocidad y en presunto estado de ebriedad.
Hasta el sitio llegó la Policía Municipal para rescatar al empleado del Ayuntamiento, por lo que se inició un forcejeo, pero finalmente lograron llevárselo los uniformados.
En medio de los reclamos y el enojo de la gente, incendiaron la patrulla 002 de la corporación. Mientras el presunto responsable fue entregado a las autoridades ministeriales, los tres menores fueron internados en el Hospital del Ángel, donde su estado de salud se reportó como delicado y se señaló que una de las menores podría perder una de sus extremidades inferiores
Ya entrada la noche, se habían congregado cerca de 800 personas que clamaban justicia tras los hechos.