Lo anterior lo señaló el titular de esta oficina, Andrés López Carrillo, al ser consultado en relación con algunas quejas por parte de consumidores de agua que es vendida a domicilio y en garrafones.
Y es que en diversas colonias del municipio se lleva a cabo la venta de agua que es transportada en triciclos y se vende como potable, lo que ha generado inquietud entre los consumidores.
“En estos casos, el consumidor debe de ser lo suficientemente capaz para distinguir este tipo de fraudes, con los que además se atenta en contra de la salud de la población, vigilando de dónde proviene el agua y si es posible, solicitar que se les permita conocer las instalaciones donde supuestamente se lleva a cabo la potabilización del agua”, sostuvo el funcionario.
Asimismo, añadió que “cuando se adquiera un garrafón éste debe de ser un recipiente limpio por fuera y por dentro, sin hoyos ni filtraciones que permitan fugas; deben de contar con razón social, es decir, con el nombre de la empresa de donde procede y algo muy importante como lo es el tapón que debe venir cerrado y sellado y sin huellas de haber sido violado.
“Los consumidores son los que deben de exigir en la compra de estos garrafones, la dirección y teléfono de la empresa para verificar, en dado caso, la procedencia del agua que les están vendiendo, y no exponerse a daños a la salud, muchas veces de graves consecuencias”, finalizó.