Josefina Rodríguez Hernández, integrante de Pueblos Unidos de Morelos, sostuvo: “Tenemos datos muy claros los cuales indican que los migrantes que llegan a Morelos, los jornaleros agrícolas, también son en una gran mayoría mujeres que se quedan ya en Morelos y los hombres siguen migrando hacia otros lugares”.
En este sentido, añadió: “Es decir, llegan al corte del ejote, en una temporada y luego emigra el hombre a Sinaloa, al corte del jitomate, y la mujer se queda aquí con los hijos, entonces las condiciones que la mujer tiene sola al frente del hogar también son muy problemáticas”.
Asimismo, Rodríguez Hernández consideró que existe “una gran cantidad de mujeres indígenas monolingües dentro de las migrantes, que no hablan el español y además, aunado a eso la discriminación tan fuerte que tenemos hacia la población indígena en general, pero en específico con las mujeres”.
De igual forma, añadió: “Pero que además realmente empoderen a las mujeres indígenas dentro de los procesos comunitarios, que eso hace falta muchísimo trabajo; pero el trabajo mayor y los retos son aún mayores en la población migrante indígena”, apuntó.
Para finalizar, destacó que los grupos indígenas no originarios que están radicados en Morelos, son los mixtecos, tlapanecos, zapotecos y otomís, los cuales vienen del estado de Guerrero, fundamentalmente, además de Oaxaca y Puebla.