Dos de dichos padecimientos son la espina bífida y la anencefalia, que se derivan de defectos en el desarrollo del tubo neural, lo que se ha asociado a una carencia de ácido fólico. Es por ello que el departamento de Ginecología insiste en la importancia de que las mujeres planeen sus embarazos a fin de poder recibir dosis de ácido fólico por lo menos tres meses antes y durante el desarrollo del embarazo.

“Es importante que la mujer programe su embarazo y acuda oportunamente a su control prenatal, para valorar las condiciones de salud y las necesidades nutricias que se requieren para un óptimo desarrollo del producto. Con el consumo de ácido fólico, dos meses antes del embarazo y durante éste, se disminuye hasta en 75 por ciento el riesgo de tener hijos con malformaciones ya señaladas”, señalaron los especialistas.

Al mismo tiempo, los ginecólogos recomiendan evitar factores de riesgo como fumar, ingerir bebidas alcohólicas, tomar medicamentos antiepilépticos y no embarazarse en los extremos de la vida, que es antes de los 20 años y después de los 40, pues son factores asociación a las malformaciones congénitas.

Los médicos del Seguro Social destacaron que “el ácido fólico desempeña un papel fundamental para mejorar la función del ADN; su carencia o insuficiencia se traduce en mutaciones a nivel celular que pueden provocar alteraciones en el sistema nervioso y en la formación de las células de la sangre”, razón por la que es indispensable que las mujeres en gestación reciban un suplemento de ácido fólico.

El ácido fólico se obtiene de manera natural mediante la ingesta de cereales, hígado, vegetales crudos de hoja verde y frutas como la naranja; pero es recomendable que las mujeres que planeen embarazarse reciban una dosis extra al día.

Los especialistas también destacaron que la deficiencia de ácido fólico en la edad adulta provoca anemia megaloblástica, “que es un tipo de anemia que se produce porque los bajos niveles de vitamina B12 o ácido fólico determinan un crecimiento desmesurado de los glóbulos rojos, la cual se manifiesta con fatiga continua, cansancio, aspecto pálido y demacrado”, señalaron.