De acuerdo con Ángela Patricia Mora González, jefa de la JS-III, “las personas de 40 años y más sufren de cáncer del cuello de la matriz, de mama o próstata”.
En este sentido, estableció que “es una lástima, pero yo creo que ni la población e incluso me atrevería a decir que ni el sector salud, hemos hecho lo propio para que el hombre se atendido en este tipo de padecimientos”.
Reconoció que la labor del sector salud ha sido dirigida más a la atención de las mujeres a través de programas especiales y explicó: “hemos buscado ayudar a quien más problemas de disparidad social tiene, y esa es la mujer, entonces enfocamos las baterías con ellas”.
“Pero hacemos un llamado a los hombres que busquen su atención, muchos saben que tienen problemas de próstata para ir al baño, por problema de erección y no buscan la ayuda de un profesional”.
Pero en esto también influyen situaciones externas. “efectivamente, le tienen temor al tacto rectal, que es una de las formas de pronosticar el cáncer u otros problemas de próstata, pero además está el antígeno prostático, que es coadyuvante también y es un sencillo examen de sangre”.
Recordó que este tipo de atención se encuentra entre las personas que tienen Seguro Popular, ya que está en su paquete básico de servicios de salud, para ser atendidos de manera gratuita.
Consultada sobre el porqué la renuncia de los hombres a ser atendidos en general cuando tienen algún padecimiento, sostuvo: “una de las causas es cultural, generalmente han crecido en la idea de que son fuertes, que no lloran, que no se quejan. Es difícil que accedan a los servicios de salud, porque es un signo, dentro de su masculinidad, de ser débiles”.
Pero además, establece “las mujeres las tenemos cerca, van al servicio de salud por los hijos, vacunas o constancias, y los hombres no es frecuente que asistan, por ello es un reto para los servicios de salud, el acercarnos a los hombres”.
Sobre el crecimiento en casos de cáncer de próstata, aseguró que “se está dado más que por estilo de vida en el caso de cáncer de próstata, muy asociado a la edad adulta mayor, o sea si hablamos de que el riesgo de desarrollar el cáncer de próstata a los 40 años, se duplica, triplica o cuadruplica si ese hombre rebasa los 80 años”.