Los ánimos se calentaron a punto de llegar a los golpes.

Cuautla. – En medio de una asamblea tensa que estuvo a punto de llegar a los golpes, fue desconocida la mesa directiva de la Junta de Mejoramiento Moral Cívico y Material (JMMCyM) del poblado indígena de Tetelcingo, después de 15 años de no rendir cuentas de los recursos que ha administrado.

La trascendencia que tiene para los habitantes esta decisión es que la JMMCyM, es la que maneja los recursos económicos de la comunidad, realiza los eventos públicos, cobra cuotas mensuales a los comerciantes y hasta ahora, sus integrantes, no han entregado cuentas de los que han administrado.

Por usos y costumbres, sin tomar en cuenta al ayuntamiento de Cuautla, más de mil 500 habitantes, organizados en planillas, se congregaron en la plaza principal de Tetelcingo para exigir la destitución de Cornelio Rey, de la planilla verde, quien ha estado al frente de dicho organismo sin dar cortes de caja, proceso aprobado por unanimidad y verificado por Lázaro Becerro Beltrán Delegado Municipal.

En un intento por aferrarse a la JMMCyM, la planilla verde postuló a Humberto Tapia quien contendió pero perdió con 312 votos en contra. Al final del recuento de votos se dieron a conocer los siguientes resultados; Planilla Roja: 548, Planilla verde: 313, Planilla café: 216, Planilla naranja: 115, Planilla Blanca: 43, Nulos: 13, total de votos: 1248.

La planilla Roja ganadora de la contienda está conformada por  Abraham Jiménez Navarro como presidente, por Luis Tapia como Tesorero y Benito Beltrán como Secretario, quienes ofrecieron anteponer la transparencia, al rendir informes cada tres meses, donde dará a conocer los cortes de caja, se impulsarán proyectos para enfrentar el rezago de Tetelcingo, con el mejoramiento de los parques, espacios públicos y lugares históricos, entre otras cosas.

Debido a que el ayuntamiento de Cuautla no intervino en ese proceso de usos y costumbres, solamente se limitó a mantener la presencia de observadores, para dar seguimiento al proceso y para intervenir en caso de un brote de violencia.