En el operativo participaron la Subdirección de Protección Civil, el área de Licencias y Reglamentos, Protección Ambiental, la Dirección Jurídica y la Secretaría de Seguridad Pública, cuyos elementos realizaron la inspección de los establecimientos donde se expendían aceites, lubricantes y gasolina.
Se presume que el combustible podría provenir de tomas clandestinas detectadas en el estado de Puebla, debido a que hace dos semanas en este municipio de Ayala fueron detenidos varios sujetos que vendían gasolina traída de San Martín Texmelucan, donde ocurrió la explosión de ductos.
En ambos lugares se encontraron tambos y garrafas con combustible junto a tanques de gas y una estufa, lo que representaba un riesgo inminente de explosión que pudo causar pérdidas materiales y vidas humanas, por lo que el Ayuntamiento, a través de las citadas dependencias, realizó la clausura de los dos establecimientos.
En el lugar recibieron las notificaciones de clausura Gustavo Huerta Flores e Inés Lima Cortés, respectivamente, quienes se dijeron encargados de los establecimientos.
El subdirector de Protección Civil, Gilberto Sánchez Medrano, señaló que estas clausuras son una medida preventiva para evitar un desastre de mayores consecuencias, ya que dichas gasolineras clandestinas ponían en riesgo la vida de los vecinos de estas comunidades.