Aseguran que en el municipio prácticamente no hubo obra pública durante el trienio que está por finalizar.

Atlatlahucan.- Ciudadanos manifestaron su molestia e indignación luego de que en días pasados, durante la visita del gobernador Cuauhtémoc Blanco a este municipio, el alcalde Esteban Hernández Franco prácticamente rindiera un informe de actividades al Ejecutivo estatal, en el que presumió los “avances” en su administración, la cual ha sido calificada como “pésima” por pobladores.

El presidente municipal dijo que durante su trienio ha cubierto el 70 por ciento de una deuda aproximada de 105 millones de pesos, mismos que –según el edil– fueron heredados por al menos cinco administraciones anteriores. Además señaló que se han realizado alrededor de 140 obras de infraestructura básica, pero habitantes del municipio aseguran que desconocen los lugares en los que se han realizado las mismas.

Derivado de esta situación, los atlatlahuquenses han solicitado que el alcalde enumere y muestre un informe detallado de las obras que refiere que se han realizado, ya que hay comunidades como San Miguel Tlatetelco en las que refieren que durante esta administración no se ha realizado ninguna obra.

“Si tapar baches, hacer poda de árboles, limpiar y barrer calles es hacer obras en beneficio del municipio, entonces sí ha trabajado. Pero no pasa de a lo mucho haber realizado diez o 15 obras en todo el municipio, esto en los casi tres años al frente de la administración municipal”, dijeron algunos ciudadanos.

Cabe agregar que durante el mensaje al gobernador, Hernández Franco aseguró que el servicio de agua potable está garantizado para al menos 95 por ciento de la población. Ello causó molestia entre los habitantes, ya que –señalaron– dicha aseveración únicamente fue “para quedar bien” con el gobernador, pero que en la realidad el escenario es otro muy diferente al que intentan mostrar.

A raíz de ello, en repetidas ocasiones, ciudadanos han solicitado a la próxima administración municipal que, a su llegada, el próximo 1 de enero, inicie un proceso de auditorías sobre la actual administración y de esta forma se determine en dónde quedaron los recursos que fueron etiquetados para la realización de obras, pero que no habrían sido aplicados en su totalidad.