Cuautla.- Poco faltó para que la mañana de ayer miércoles brotara la violencia entre diversas agrupaciones de transportistas, cuyos integrantes, armados con palos y tubos, estuvieron frente a frente a menos de dos metros de distancia, dispuestos a defender lo que consideran les pertenece al haber comprado nuevos permisos y, otros, para defender sus derroteros que, aseguran, son invadidos con las nuevas autorizaciones.

Lo anterior se registró sobre la carretera federal Cuautla-Cuernavaca, a la altura del crucero de Casasano, frente al plantel del Colegio de Bachilleres, donde integrantes de la Ruta 3 de Cuautla, apoyados por la Ruta 13 de Oaxtepec, continuaron por tercer día consecutivo deteniendo a unidades de las Rutas 14 de Tlayacapan, 13B de Tlalnepantla y la Ruta Interescolar de Yautepec, las cuales insisten en cargar pasaje en derroteros que no les corresponden.

Dicha medida la llevaron a cabo ante la negativa del secretario de Movilidad y Transporte David Martínez de establecer una mesa de diálogo, similar a la que ha sostenido en dos ocasiones con los invasores de sus territorios, quienes, apoyados por otras rutas foráneas, han bloqueado las avenidas Insurgentes y Reforma para exigir se permita trabajar a unidades con los nuevos permisos adquiridos.

Desde el lunes pasado, cuando los afectados de las Rutas 3 y 13 iniciaron con la detención de unidades que consideran irregulares, los transportistas representados por Mauro Rivera de la Cruz bloquearon las dos principales avenidas de Cuautla, logrando así una reunión a las 6 de la tarde con el titular de la SMyT y el alcalde de Cuautla, donde se acordó que se emprenderían acciones legales en contra de quienes volvieran a cerrar las calles.

Sin embargo, al no haber diálogo con las dos partes en conflicto, el martes se volvió a repetir la misma situación, por lo que las agrupaciones de Rivera de la Cruz volvieron a cerrar las avenidas Insurgentes y Reforma, sin que se cumpliera el acuerdo de emprender acciones legales. Para destrabar el conflicto se ofreció una reunión con los transportistas de la Ruta 3, sin embargo, nunca llegó a la cita el secretario de Movilidad y Transporte, ni ninguna otra autoridad, pero sí se realizó otra reunión con el titular de la SMyT y los transportistas foráneos.

Ante la marginación de la que fueron objeto, los presuntos afectados con la competencia desleal decidieron continuar deteniendo las unidades, lo que ocasionó una reacción violenta  de los supuestos invasores, quienes, armados con palos y tubos pretendieron impedir dichas acciones.

Cerca del mediodía la tensión aumentó y el grupo a favor de las “rutas” foráneas inició su marcha para encarar a los opositores, pese a que ya habían llegado elementos de Movilidad y Transporte para atender la situación y que acordaron evitar la retención de más unidades, así como llegar a un acuerdo en una reunión donde ambas partes estuvieran presentes, además del secretario de Movilidad y Transporte.

Lo anterior provocó molestias y afectaciones a los ciudadanos, quienes vieron interrumpido su desplazo a sus centros de trabajo, a las escuelas y a sus actividades diarias. Fue hasta después de las 14:00 horas que llegó al palacio municipal David Martínez Martínez, quien dijo desconocer la situación y que acudía a enterarse. Después de una larga reunión se acordó establecer paradas para los transportistas locales y para los foráneos, sin embargo, ante el incumplimiento reiterado de los acuerdos, el peligro de un enfrentamiento sigue latente.