"No importa qué tan ridículo le parezca a los demás, es el deseo de su corazón", dice el pastor evangélico al que una mujer le pidió rezar para que su pecho izquierdo creciera y se nivelara con el derecho.
"Padre, hazlo en el nombre de Jesús, para ti no hay imposibles. Tú sólo ves el corazón. Emparéjate, emparéjate".
Y sí. De acuerdo con sus feligreses, los senos de la joven se emparejaron tras una breve oración. Fue la solicitante quien testificó el hecho luego de acudir al baño a verificar los resultados.