Una vez que el parto había terminado, el veterinario pudo investigar todo más a fondo. Después de enviar algunas muestras de sangre a unos especialistas en reproducción para hacer pruebas, se llegó a una conclusión inesperada: los pequeñines eran gemelos idénticos.
El par de perritos podrían ser el primer registro de gemelos idénticos en un canino. De acuerdo a lo que Cramer le dijo a BBC, es posible que esto ya haya ocurrido en algún momento, pero que ningún veterinario o científico había tratado de confirmarlo por medio del ADN. Al mismo tiempo, esto se podría considerar como una asombrosa coincidencia, ya que la madre no necesitó intervención quirúrgica para el parto y después de este, aún no se había comido la placenta, que era la mejor evidencia.
Los gemelos, bautizados como Romulus y Cullen, apenas poseen diferencias en su apariencia física, porque presentan muy pocas variaciones en ciertas marcas corporales. Estos preciosos cachorritos se han desarrollado de manera normal y se espera que tengan un crecimiento saludable, por lo que será documentado por Twitter e Instagram.
Sin duda un caso fascinante, pero adorable, ¿no creen?